“El medio ambiente ha dejado de ser una moda para convertirse en una de las claves de la competitividad del sector”. Así lo ha asegurado Pedro Astals, presidente de Fiab, durante el congreso “Alimentamos un futuro sostenible: Retos ambientales de la Industria Alimentaria a 2020”, organizado por esta federación en el marco del Envifood Meeting Point.

El primero de los retos planteados de cara a esa fecha es alimentar a una población creciente en un entorno de escasez de recursos. Todas las previsiones apuntan a que, para el año 2030, será necesario aumentar el 50% el suministro de alimentos para satisfacer las demandas de la creciente población mundial.

En segundo lugar, es preciso gestionar el agua de forma más sostenible. A ello, hay que sumar la mejora de la eficiencia de procesos y mitigación del cambio climático, para lo cual es vital impulsar la colaboración con los proveedores con el fin de optimizar el transporte y la distribución de materias primas.

Otro reto es mantener la competitividad industrial en un entorno de incertidumbre jurídica y dependencia energética. Y el último objetivo imprescindible puesto de relieve en el congreso, consiste en minimizar el impacto ambiental de los envases. En España se reciclan 7 de cada 10 envases puestos en el mercado.

Más de 150 profesionales de la alimentación han conocido de primera mano soluciones en materia de sostenibilidad para sus empresas y recomendaciones o ejemplos de compañías como Nestlé, Unilever o Calidad Pascual.