VOG, el consorcio de las cooperativas hortofrutícolas del Alto Adige (Italia), cumple 70 años. Con motivo de este aniversario, la compañía cambia su logo, que transmite a la imagen del consorcio una impronta más moderna aunque se mantiene en equilibrio con las características cromáticas y estilísticas del pasado.

El consorcio nació el 24 de agosto de 1945 al término de la Segunda Guerra Mundial. En concreto, Josef Ungericht, presidente de la cooperativa de fruticultores CAFA, logró convencer a las demás cooperativas de la necesidad de colaborar estrechamente para afrontar con un esfuerzo colectivo la nueva y compleja situación económica tras la campaña bélica. A las nueve cooperativas fundadoras se suman pronto muchas otras. En 1999 se produce la unión con ESO, otra organización de productores del Alto Adige. Tras las diversas fusiones en 2011, las cooperativas pasan de 33 a 16, una de ellas especializada en la elaboración del producto biológico.

Actualmente, forman parte de la misma 4.938 socios productores que, en una superficie de unas 10.700 hectáreas, cosechan unas 650.000 toneladas anuales de fruta de alta calidad. Así, hoy día se trata de la mayor organización en la comercialización de las manzanas en Europa y una de las instituciones más importantes de la economía del Alto Adige.

Gerhard Dichgans, director del consorcio, explica que el curso de los años ha hecho posible la evolución hacia un cultivo “especializado, moderno y competitivo” de la manzana capaz de alcanzar un “altísimo nivel cualitativo”. En este sentido, Dichgans afirma que 2010 marcó una etapa “fundamental” en su estrategia empresarial: la comercialización se centralizó en el consorcio VOG. Así, señala que el objetivo es reforzar la competitividad en el mercado para garantizar un futuro a nuestros asociados también en los próximos decenios.

Por su parte, el presidente del consorcio, Georg Kössler, destaca que el VOG ha logrado convertir la manzana del Alto Adige en un producto sinónimo de “alta calidad en el ámbito mundial”.