Había expectación y no defraudó. El director general de Logística de Mercadona, Oriol Montanyà, intervino este martes en Madrid en el VI Congreso Aecoc de Supply Chain para esbozar algunas de las claves logísticas de la cadena valenciana, basadas en intentar "ser cada vez menos logísticos y más vendedores". Montanyà invitó a todos los presentes, más de 400 profesionales de la cadena de suministro, a hablar "menos de cifras y más del cliente".

'El reto de ser cada vez menos logísticos' era el título del discurso del responsable de Mercadona, que no se salió de la línea comunicativa que caracteriza a la empresa presidida por Juan Roig. "Hay que pensar siembre en la satisfacción del cliente", apuntaba, destacando que no todo debe ser logística si al final se ofrece a los consumidores un producto de mala calidad.

Montanyà puso varios ejemplos reales ocurridos a Mercadona de cosas que no debe hacer ninguna cadena de distribución a nivel de logística. Por ejemplo, detalló un ya pasado proceso de transporte de pollos de un proveedor de Galicia a Castellón, largo y engorroso con la consiguiente pérdida de frescura del producto. Así, lamentó que Mercadona pasara de unas ventas de carne de 826 kilos por tienda y día en 2012 a los 751 registrados el año pasado.

"Hay cinco objetivos logísticos que se deben cumplir con un orden secuencial: calidad, cantidad, momento, lugar y coste", enumeró Montanyà. Si no se sigue ese orden, "no se logrará la máxima productividad". También habló de coherencia, pues "no tiene sentido decir que se hace una cosa y luego hacer justamente lo contrario".

Después de indicar que tanto Mercadona como sus colaboradores logísticos y de transporte comparten "el mismo jefe, el más exigente: el cliente”, Montanyà afirmó que a nivel logístico a Mercadona también le interesa respetar el entorno, "siendo invisibles tanto para los vecinos como para el medio ambiente", y a sus trabajadores, "para que puedan pasar toda su trayectoria profesional con nosotros".

De esta forma, Montanyà concluyó con buenos ejemplos de logística con los que Mercadona se siente orgulloso: como comprar pescado en 80 lonjas y llevarlo en el mismo día a unas 800 tiendas cercanas a la costa o al día siguiente para establecimientos del interior; o recolectar fresas en Huelva para ponerlas a la venta el día siguiente en Galicía; o, por último, subir la venta de frutas en 500 kilos por tienda y día en los últimos años gracias a instalaciones logísticas automatizadas.