Los consumidores valoran cada vez más los envases 'convenience' por ser "prácticos, cómodos, limpios y fáciles de cerrar y transportar". Así lo atestigua una investigación realizada por Consumolab (centro Ainia) en el marco del proyecto Convipack. Además, este estudio pone de relieve la preferencia por "productos saludables, envasados en materiales seguros y sostenibles, sin renunciar a un diseño atractivo y que presente un etiquetado fácil de entender".
No obstante, las prioridades cambian según las necesidades concretas de cada segmento de población. Así, los millennials prefieren los envases ‘on the go’, por ser ergonómicos y fáciles de consumir en cualquier momento y lugar, así como los que restan menos tiempo a la hora de preparar la comida, sin tener que renunciar a la calidad ni al sabor, como los microondables.
Los consumidores seniors demandan envases con facilidad de apertura y tamaño y peso reducido
Por su parte, los seniors, un segmento de la población con gran fuerza de consumo, demanda envases con facilidad de apertura y una preparación sencilla, de tamaño y peso reducido, y con un etiquetado claro y fácil de interpretar.
ADAPTAR EL PACKAGING
Los cambios demográficos, nuevos modelos de familia, hábitos de consumo adaptados al ritmo de vida actual o un consumidor más informado y exigente con tendencia a una dieta más saludable, son algunos de los factores que han modificado las necesidades del mercado actual. “En este sentido, el envase convenience es una tendencia de futuro y una exigencia ineludible para la industria alimentaria”, señalan desde Ainia.
Según José Ángel Garde, del departamento de tecnologías del envase de este centro, uno de los aspectos fundamentales que se ha tenido en cuenta en el proyecto Convipack, es la “validación del envase convenience” por parte del consumidor final.
“Las opiniones del consumidor nos permiten contrastar los resultados obtenidos a nivel de laboratorio para lograr una correlación más estrecha entre las prestaciones de los materiales convenience y las necesidades y requerimientos, tanto del productor de alimentos, que se encuentra con una oferta muy amplia de materiales convenience, pero que desconoce el comportamiento de estos materiales a la hora de adaptarlos al producto que elabora, como del consumidor final”, añade.
INNOVACIÓN EN NUEVOS MATERIALES
En Ainia se están trabajando especialmente dos líneas de investigación en envases funcionalizados para alimentos o envases convenience. Por un lado, en la selección de materiales de envase con nuevas funcionalidades y diseños adaptados a las exigencias de los consumidores y por otro, se investigan materiales más sostenibles.
Gracias a este proyecto se han logrado mejoras en la apertura del envase y se ha tenido en cuenta la posibilidad de que el producto pueda cocinarse en él
“En este proyecto hemos logrado mejoras en la apertura del envase, más cómoda y sencilla, así como un mejor cerramiento del mismo. También hemos tenido en cuenta la posibilidad de que el producto pueda cocinarse en el propio envase. Ambos aspectos muy valorados por los consumidores en los envases convenience”, explica Leonor Pascual, técnico del departamento de tecnologías del envase de Ainia.
“El consumidor busca comodidad en el packaging. Además, quiere que el envase le muestre el producto y que éste sea saludable y fácil de preparar. Para responder a estos requerimientos las empresas de alimentación deben apostar por la innovación en nuevos materiales y funcionalidades de envases convenience que, además, garanticen la seguridad de los alimentos”, ha añadido esta experta.
