El apretón de manos entre Eroski y Grupo Dia ha llegado a un nuevo nivel después de que ambas compañías hayan anunciado un acuerdo para crear una nueva sociedad que tendrá como objetivo la negociación con proveedores de marcas de distribuidor para ambas compañías. Lograr la mejor relación calidad-precio siempre es el fin.
La nueva sociedad, llamada Red Libra Trading Services SL, estará constituida de forma paritaria al 50% entre Grupo Eroski y Grupo Dia. Con sede en Madrid, contará inicialmente con una plantilla de 53 profesionales procedentes de ambas compañías y empezará a operar a partir del próximo 3 de mayo.
La presidenta no ejecutiva de esta nueva sociedad será Beatriz Santos, actual directora comercial de Grupo Eroski, mientras que la Dirección General estará ocupada por Susana Pagés, procedente de Grupo Dia.
Ambos retailers esperan que la nueva sociedad logre mejorar la competitividad de su oferta de marca propia, así como la adquisición de otros materiales y suministros necesarios para su actividad. Quedan totalmente excluidos de este acuerdo los productos frescos perecederos, así como aceite, leche y huevos.
Como en acuerdos anteriores a los que han llegado ambas empresas, tanto Eroski como Dia resaltan que mantendrán políticas comerciales totalmente independientes. Red Libra Trading Services SL, indican, está abierta a la posible futura entrada de nuevos socios.
Ya en marzo, Eroski y Dia anunciaron su pacto para potenciar sus marcas, aunque no detallaron del todo qué medidas específicas llevarían a cabo. La creación de esta sociedad es la respuesta. Tampoco hay un cálculo previsto de cuánto se pueden abaratar sus productos de, como se suelen denominar, marca blanca.
La 'unión' de ambas empresas ya viene de lejos. Su acuerdo en 2015 para ganar eficiencia en las negociaciones con los proveedores dio, y da todavía, mucho que hablar, ya que fue denunciado por la Fiab y Promarca ante la CNMC por posibles conductas constitutivas de infracción de lo dispuesto en la ley de Defensa de la Competencia. La CNMC archivó el caso, pero éste sigue pendiente de una resolución de la Agencia de Información y Control Alimentario (AICA), dependiente de Mapama.
