Mahou San Miguel ha incorporado las denominadas smartglasses o gafas de realidad aumentada en sus centros de producción de cerveza y manantiales. El objetivo es que esta tecnología sirva como como asistencia remota y de ayuda entre sus plantas repartidas por toda la geografía nacional, "aportando a los profesionales un mayor margen de maniobra, aumentando la eficiencia y permitiendo un ahorro de tiempo y costes", explica la compañía.
Esta tecnología se compone de un soporte remoto con transmisión en tiempo real. Un profesional experto, provisto de un dispositivo conectado a internet y ubicado en cualquier localización, puede ver la actividad que está ejecutando el técnico en alguno de los centros y que está provisto de las Smartglasses. De esta forma, puede asesorarle a distancia y validar procedimientos, siempre que sea necesario. Esta conexión está dotada de una comunicación bidireccional y pizarra compartida que permiten al profesional situado a pie de campo realizar preguntas y recibir información al momento.
FASES DE IMPLEMENTACIÓN
El proyecto, que se encuentra en la primera fase de implementación, se ha desarrollado en colaboración con la tecnológica española Zerintia Technologies, especializada en Internet de las Cosas y Wereables. En la segunda fase, se prevén dos líneas adicionales de aplicación de las gafas de realidad aumentada: por un lado, los profesionales de la cervecera podrán generar y compartir vídeos que sirvan como base y apoyo a la unificación y estandarización de procesos en los distintos centros productivos; y por otro, servirá como una aplicación formativa, generando material didáctico que se podrá compartir posteriormente.
La cervecera ha invertido cerca de 269 millones de euros en la última década en sus instalaciones productivas
"Nuestros centros de producción son sinónimo de innovación, y llevamos años implantando en ellos las aplicaciones más novedosas vinculadas con la fábrica inteligente", señala Nicolás Castrejón, director Industrial de Mahou San Miguel. "A través de la incorporación de la tecnología más puntera garantizamos la máxima calidad, flexibilidad y fiabilidad operativa", añade. La compañía ha invertido cerca de 269 millones de euros en la última década en sus instalaciones productivas.
