La compañía neerlandesa Just Eat Takeaway.com aumentó el año pasado sus ingresos el 33%, hasta los 5.300 millones de euros, aunque registró en total una pérdida de 1.000 millones de euros tras importantes inversiones en el Reino Unido y un aumento de gasto en costes de adquisición.

Según los resultados presentados este miércoles, la empresa de servicios de entrega a domicilio subrayó que el año pasado fue “de fuerte crecimiento impulsado por las inversiones” de la compañía durante la pandemia y señaló que sus ingresos crecieron hasta los 5.300 millones de euros, en comparación con los 4.000 millones de 2020.

La pandemia animó a los clientes a pedir comida a domicilio y muchos restaurantes tuvieron que dejar de recibir clientes en sus locales, ofreciendo solo pedidos para llevar.

Sin embargo, la empresa registró una pérdida de 1.044 millones de euros en 2021, en comparación con 151 millones de euros en 2020, lo que se debe a las inversiones en el Reino Unido y un gasto de 350 millones de euros en costes relacionados con la adquisición.

Su director ejecutivo, Jitse Groen, señala que la compañía “ahora está progresando rápidamente hacia la rentabilidad” después de “un periodo de inversión significativa y con pérdidas de ebitda ajustado que alcanzaron su punto máximo en la primera mitad de 2021”.

La empresa duplicó los pedidos en los últimos dos años en el Reino Unido e Irlanda y su región más rentable se localiza en el norte de Europa, con 256 millones de euros en ebitda, aunque asegura haber mejorado también sus operaciones en otras zonas.

La compañía se retira en abril de los mercados noruego y portugués para "concentrarse en posiciones de liderazgo y fuentes de beneficios" y finalizará su cotización en el Nasdaq el 11 de marzo.