Así convierte Greene los residuos cárnicos en biocombustible

Utiliza un sistema de degradación térmica del que se obtienen aceites para ser usados, entre otras, en la industria cosmética.

Greene convierte residuos cárnicos en biocombustible

Convertir residuos cárnicos en biocombustible ya es posible gracias a la compañía Greene Waste to Energy, con sede en Elche (Alicante), que ha puesto en marcha en sus instalaciones una planta de valorización de estos residuos, con capacidad de procesado de 5 Kg/h, en la que se utiliza una tecnología basada en la pirolisis.

Se trata de un sistema de degradación térmica que permite obtener de los residuos distintos subproductos, como aceites de alto valor añadido para ser usados como combustibles e, incluso, en la industria cosmética y farmacéutica.

Esta instalación, en la que la compañía ha invertido 400.000 euros, se encuentra en fase de pruebas y forma parte de un proyecto, cofinanciado por la Unión Europea, en el que la empresa colabora con la Universidad de Alicante, además de otras compañías y centros de referencia de España, Italia y Dinamarca. El objetivo final es mejorar la rentabilidad del proceso de degradación actual en más de un 20%.

Este nuevo procedimiento de tratamiento de residuos no solo permitirá mejores rendimientos económicos a las empresas del sector en el tratamiento de sus residuos, sino que también disminuirá el impacto ambiental del proceso y la mejora energética en su procesado.

A lo largo de los próximos meses, los técnicos de Greene realizarán pruebas con el fin de obtener un bioaceite que se pueda rentabilizar como combustible, o como subproducto de valor en el mercado, en el sector de la cosmética o de la alimentación.

Además, como productos secundarios del proceso se obtendrá un residuo carbonoso que puede ser recuperado para la generación de energía y una fase líquida que podría ser utilizada como fertilizante.