La cadena británica Marks and Spencer ha anunciado este martes que recortará 7.000 puestos de trabajo en los tres próximos meses debido al impacto de la pandemia de Covid-19 y a una menor afluencia de clientes en sus tiendas, informa la agencia AFP.

En concreto, la compañía planea llevar a cabo esta medida mediante jubilaciones anticipadas o despidos voluntarios. La supresión de empleos afectará especialmente a las tiendas ubicadas en el Reino Unido y al personal directivo.

Asimismo, la firma quiere concentrar sus esfuerzos en el ecommerce, en línea con los nuevos hábitos de los consumidores que han multiplicado notablemente sus compras en la red a raíz de la pandemia. En este sentido, la cadena piensa contratar nuevo personal para las ventas en Internet.

"En mayo habíamos anunciado que aprenderíamos de esta crisis, que íbamos a acelerar nuestra transformación y convertirnos en una empresa más ágil, en un mundo en el que los hábitos de consumo han cambiado de manera definitiva", recordó Steve Rowe, director general del grupo. "Hoy anunciamos propuestas para flexibilizar aún más nuestras operaciones en las tiendas y nuestras estructuras de dirección", agregó.

SUBIDA DE LA VENTA DE ALIMENTOS

Marks & Spencer registró una bajada del 10% en sus ventas entre comienzos de junio y principios de agosto. El descenso principal (-29,9%) en este periodo afectó a los departamentos de ropa y productos para el hogar.

Por el contrario, las ventas online en estas áreas de negocio se incrementaron el 39,2% en el mismo periodo, según datos de la compañía, que también ha elevado sus ventas de alimentos un 2,5% entre junio y agosto.