Parece que los plazos manejados por Amazon para estrenar su supermercado Amazon Go al público se retrasan, debido a los problemas técnicos que está teniendo su tienda piloto, situada en Seattle y operativa en los últimos meses solo para los empleados de la compañía.

La tienda, basada principalmente en un sistema tecnológico que utiliza una aplicación móvil para el cobro de los productos y prescinde con ello de las clásicas cajas, está teniendo problemas cuando acoge a un gran número de clientes, informa The Wall Street Journal, el medio estadounidense que mejor información maneja sobre las novedades del gigante online.

Al parecer, las cámaras, sensores y algoritmos que siguen a los compradores y rastrean los productos funcionan "impecablemente solo si hay un pequeño número de clientes presente o sus movimientos son lentos", indican fuentes de Amazon al citado periódico.

Hay problemas, por ejemplo, cuando hay unas 20 personas en el supermercado. También surgen fallos cuando se quiere localizar la etiqueta de un producto cuando este ha sido movido de su lugar específico en los estantes.