La Comisión Europea estudia la posibilidad de crear un nuevo impuesto a los plásticos con el objetivo doble de aumentar los ingresos y de reducir el uso de este material. Esta decisión se tomaría de cara al próximo presupuesto plurianual de la Unión Europea.

Según ha explicado Günther Oettinger, comisario de Presupuestos y Recursos Humanos, este plan presupuestario será el primero tras la salida del Reino Unido de la Unión Europea, en marzo de 2019, informa Europa Press. Y es que el Brexit representa una pérdida de entre 12.000 y 14.000 millones de euros anuales en ingresos que el Ejecutivo comunitario quiere compensar. Así, tiene previsto recortar el presupuesto entre 6.000 y 7.000 millones anuales e incrementar los ingresos en la misma cantidad.

Es en este último apartado donde encaja la posibilidad de aplicar una tasa a los plásticos. Oettinger simplemente ha expuesto que se trata de ver cómo reducir la cantidad total de plástico. "Hay que ver cuál sería mejor enfoque", ha explicado añadiendo que también cabe plantear excepciones sobre productos de primera necesidad, como los envases de leche.

OTRAS MEDIDAS EN CARTERA

A este respecto, otra opción que se baraja desde Bruselas es cambiar el funcionamiento del comercio europeo de emisiones, cuyos ingresos se recaudan actualmente a nivel nacional, para que pasen a ser fuentes de financiación a nivel comunitario en lugar de para los Estados miembros.

También por el lado de los ingresos, el comisario alemán ha reiterado que será necesario aumentar la aportación de los Estados miembros al presupuesto comunitario por encima del 1,% del PIB actual. En concreto, ha afirmado que la nueva cifra debería situarse entre el 1,1% y el 1,2%.

En el apartado de recortes, éstos afectarán a la Política Agraria Común (PAC) y a la política de cohesión, aunque serán menores al 15%, ha subrayado el comisario europeo. Fuentes comunitarias han especificado que la reducción para estas dos partidas será de entre el 6% y el 8%.