Restalia ha aportado siete millones de euros en ayudas para sus franquiciados en seis planes distintos que ha activado en los últimos meses, según informa Crónica Global. La compañía de restauración diseñó distintos programas de apoyo para compensar el impacto de la pandemia de Covid-19 a la hostelería, uno de los sectores más debilitados por las restricciones en España.

“Este tiempo ha sido un punto de inflexión donde se ha podido comprobar el avance de la restauración organizada frente a los restauradores independientes, ya que éstos no contaban con el apoyo ni el respaldo de un grupo que velase por sus intereses”, explican desde el grupo.

Restalia impulsó, en la primera mitad de 2020, diferentes planes regionales para amortiguar el impacto de la crisis y reactivar el consumo a nivel local. En septiembre de ese año, llegó un segundo paquete de medidas, que incluían bonificaciones especiales en productos estratégicos de marca y la financiación de compras de materias primas para franquiciados en situaciones especiales, según informa la compañía.

En enero de 2021, Restalia volvió a lanzar un plan para potenciar la venta por delivery, y para adaptar y acondicionar las terrazas. En septiembre de ese mismo ejercicio se repartió otro paquete económico para subvencionar la factura de la luz de sus franquiciados, ante el incremento de la electricidad.

Por último, en diciembre de 2021, surgió una nueva crisis: la de suministros y transporte. Este plan tenía dos objetivos, “contener las subidas de precios de las materias primas para sus asociados y reforzar, mediante un análisis de mercado, la cadena de suministros de sus productos”. En abril de 2022, Restalia lanzó su última medida: la contención de los precios para paliar los efectos macroeconómicos de la inflación y la guerra de Ucrania.