Los establecimientos hosteleros afrontan el invierno “con máxima incertidumbre” por la elevada inflación y el encarecimiento de la energía eléctrica, aunque con la esperanza puesta en una “buena temporada de nieve”, según declaraciones del secretario general de la Federación de Hostelería de Lleida, Ramon Solsona, recogidas por Segre.

Solsona ha querido hacer hincapié en la alta ocupación durante el verano, ya que los negocios han registrado ocupaciones máximas de su serie histórica. Por ejemplo, los campings han acogido a unas 171.000 personas, y los hoteles, a casi 216.000 en julio.

Además, el presidente de la Confederación Catalana de Agroturismo y Turismo Rural (Concatur), Ferran Puig, señala que sus asociados mantienen las cifras de 2019. A pesar de esto, advierte que hay algunos establecimientos que preferirán no abrir en invierno por el incremento de los costes de energía, ya que “encender la calefacción para un 50% de ocupación no sale a cuenta”.