Amazon y Walmart están probando desde finales del año pasado un servicio novedoso por el cual los retailers llevan la compra a los consumidores cuando estos no están en sus casas. Es decir: del supermercado directo a la nevera. Lo que implicaría que un 'extraño' pueda entrar a los domicilios de cualquiera para entregar los pedidos. Muchos pueden recelar de este servicio, pero también tiene sus adeptos y los distribuidores se están planteando seriamente desarrollarlo para "facilitar la vida a muchos compradores". El primero en hacerlo en Europa ha sido un retailer alemán: Edeka.

La cadena germana de supermercados está probando este servicio a través de su tienda online, Bringmeister, y en determinadas zonas de Berlín y Múnich. De momento, con buenos resultados.

Según informa la propia compañía, el proyecto utiliza un sistema de seguridad muy preciso para que los clientes se sientan seguros a la hora de permitir la entrada en sus casas de un repartidor. Para ello se usarían cerraduras electrónicas, llamadas Smart Locks, que permitirían a los trabajadores del supermercados entrar en los domicilios por tiempo limitado y siendo controlados por los clientes.

En el servicio no solo implicaría que un retailer pueda enviar un pedido pese a que el comprador no se encuentre en su casa, sino que también se amplía con la posibilidad de que el mismo repartidor sea el encargado de colocar los productos en las cocinas de los clientes. Sobre todo está recomendado para productos que necesiten frío, los cuales irían directamente a los frigoríficos.

Por cierto, hay que decir que contar con el sistema de llave electrónica supondría un gasto para los clientes de 9,99 euros al mes.

Veremos la evolución de las pruebas que realizan tanto Walmart como Amazon y Edeka. ¿Habrá algún retailer español que se atreva a lanzar este servicio en nuestro país?