El 42% de las organizaciones de gran consumo y retail espera que se produzcan desabastecimientos o escasez de productos de cara a la próxima Navidad, el 38% anticipa retrasos en las entregas a sus clientes debido a demoras en las operaciones de importación y el 35% de las organizaciones prevé falta de mano de obra.

Entre son los principales problemas que anticipa el sector según recoge el último informe del Instituto de Investigación Capgemini, Iluminar el camino: Construir cadenas de suministro resistentes y eficientes en la industria de productos de consumo y retail, que examina cómo estas compañías están transformando su estrategia de las cadenas de suministros para infundir resiliencia, eficiencia y sostenibilidad a su negocio.

El análisis señala que las empresas de productos de consumo y retail están diversificando y adaptando sus cadenas de suministro para hacer frente a los retos de las entregas de última hora, a las expectativas de un comercio que demanda agilidad y velocidad, para para evitar que se agoten las existencias durante la ajetreada temporada navideña.

En la actualidad, casi ocho de cada diez (79%) organizaciones del sector están diversificando su cartera de proveedores, y el 71% invierte activamente en la regionalización y localización de los mismos. Por ejemplo, el 83% de las organizaciones está invirtiendo activamente en el 'friend-shoring', una práctica comercial cada vez más extendida en la que las redes de las cadenas de suministro se centran en países considerados aliados políticos y económicos para reducir aún más su exposición al riesgo.

INFLACIÓN, TENSIONES Y COSTES

Según este nuevo informe, en la actualidad, las cadenas de suministro globales se ven amenazadas por una multitud de factores, como la inflación, las tensiones geopolíticas, la excesiva dependencia de determinados países en cuanto a componentes, la fluctuación de las tarifas de fletes en mercancías y las aglomeraciones portuarias.

Más de tres cuartas partes (77%) de estas empresas afirman que las cuestiones geopolíticas están repercutiendo en los costes y la eficiencia de las cadenas de suministro. En este contexto, el informe concluye que el 'nearshoring' y el abastecimiento nacional están ganando importancia a medida que las compañías intentan encontrar un equilibrio entre costes y resistencia.

A escala global, se espera que para 2025 la compra offshore descienda el 7%, mientras que la deslocalización cercana y la contratación nacional aumentará el 4% y el 3%, respectivamente. Norteamérica lidera la tendencia de la deslocalización, con un aumento del 9% de la compra nearshore en términos del valor del dólar, un aumento del 4% de la contratación nacional y una reducción del 15% de la contratación en el extranjero prevista para 2025.

"A medida que las interrupciones de la cadena de suministro continúan planteando nuevos desafíos para las organizaciones de productos de consumo y retail, éstas están cambiando sus estrategias de abastecimiento para crear resiliencia. Equilibrar la rentabilidad con la resiliencia, centrándose al mismo tiempo en la adopción de prácticas sostenibles y de economía circular, contribuirá en gran medida a crear cadenas de suministro preparadas para el futuro que puedan impulsar un crecimiento rentable", afirma Lindsey Mazza, directora global de Retail en Capgemini.

"Para adaptarse y prosperar, las organizaciones de productos de consumo y retail deben centrarse también en prepararse para la temporada navideña, que puede ser un periodo rentable pero difícil. Optimizar los inventarios, localizar las redes de la cadena de suministro y explorar opciones de cumplimiento alternativas puede ayudar a las empresas a estar más preparadas durante este periodo para satisfacer las expectativas de los consumidores. La tecnología y los datos desempeñarán un papel fundamental en este sentido, ya sea ayudando a detectar la demanda, automatizando los almacenes, mejorando la experiencia del cliente o garantizando un cumplimiento eficiente", añade.

MEJORAR LA CADENA DE SUMINISTRO

La investigación señala que las empresas siguen mostrándose cautelosamente optimistas en 2023. Las organizaciones se están centrando en aumentar la eficiencia de costes en las cadenas de suministro a través de una mejor planificación, mejora de procesos y automatización. Para el 42% de ellas, la mejora de la eficiencia de costes de la cadena de suministro es el principal objetivo en los próximos 12-18 meses.

Sin embargo, para lograrlo, la gran mayoría (82%) cree que su cadena de suministro tendrá que cambiar significativamente, y casi nueve de cada diez (86%) afirman que los datos y la tecnología deben desempeñar un papel clave para garantizar esa transformación. De las tecnologías que se están adoptando, implantando y ampliando, la gestión de datos (56%), el Cloud computing (55%) y la automatización (52%) encabezan el orden de prioridades para ahorrar costes e impulsar los ingresos.

RETOS EN SOSTENIBILIDAD

Asimismo, tres cuartas partes (75%) de las empresas del sector encuestadas afirman que están haciendo esfuerzos conscientes para ser más sostenibles. Del mismo modo, casi nueve de cada diez (86%) reconocen que el abastecimiento, el transporte y la producción ética y responsable son fundamentales para lograr una ventaja competitiva. Esta cifra era sólo del 69% cuando se encuestó en 2020.

Sin embargo, menos de la mitad de las empresas han implementado y ampliado iniciativas de sostenibilidad: sólo el 49% lo ha hecho para el abastecimiento responsable, el 45% para el diseño de productos reciclables y otro 45% para los envases reutilizables. Aunque esto supone una mejora respecto a los niveles de adopción en 2020, el estudio muestra que las inversiones medias en sostenibilidad respecto a los ingresos han disminuido ligeramente en comparación con 2020.

Por su parte, gestionar la volatilidad de la demanda de los consumidores y volver a centrarse en la eficiencia de costes es hoy una prioridad clave para las empresas de gran consumo. Además de las estrategias de abastecimiento, el informe destaca que los datos y la analítica ayudarán a mejorar la previsión de la demanda, el cumplimiento y la experiencia del cliente. También permitirán la optimización y automatización de productos y portfolios, especialmente en la producción y el almacenamiento, lo que puede conducir a un aumento tanto de los ingresos como de los beneficios. La adopción de prácticas de economía circular y una mayor transparencia en la cadena de suministro pueden ayudarles a cumplir los objetivos de sostenibilidad, avanza el análisis.