Shoppers | Divulgar la agroalimentación en redes sociales: del marketing del miedo al sentido común

En la alimentación, por desgracia, los mensajes que más calan son los del marketing del miedo. Es mucho más efectivo demonizar alimentos, marcas o cadenas, que explicar por qué es importante una dieta equilibrada.

Tres de cada diez consumidores utilizan las redes sociales para inspirarse al comprar en el supermercado
Muchos consumidores utilizan las redes sociales para inspirarse al comprar en el supermercado

El profesor, científico, escritor y divulgador José Miguel Mulet apunta cuatro de las claves que nos deben alertar como consumidores de información agroalimentaria en redes sociales: qué nos venden, qué no explican, qué temor quieren difundir y a quién quieren demonizar.

Con 80.000 seguidores en X, Mulet insiste en que, como profesor de universidad y científico, su objetivo es "contar cosas que sean ciertas para que todo el mundo las entienda" y reflexiona: "El que te está contando algo ¿en qué fuentes se basa? ¿Cita los estudios? ¿Distingue lo que es una opinión de un hecho?"

En este aspecto coincide con la profesora e investigadora norteamericana Marion Nestlé. Consultada por Efeagro insiste en que su opiniones personales las etiqueta "como comentarios" y su diálogo on line (con 140.000 seguidores en X y su blog foodpolitics.com) es "estrictamente profesional y relacionado con la política alimentaria".

"Aconsejo a los lectores que utilicen el sentido común -si suena demasiado bueno para ser verdad, probablemente no lo sea- y que piensen en qué se basan las opiniones. Las fuentes en las que confío citan sus fuentes o enlazan con ellas", asegura.

Según el estudio de IAB Spain "El estado del marketing de influencer", "el 61% de los consumidores encuestados confía en las recomendaciones de amigos, familiares o personas influyentes en plataformas sociales, aumentando hasta el 66% si solo tenemos en cuenta a la generación Z".

Con más de 100.000 seguidores en Instagram a través de la cuenta "The Chef's Garden", el agricultor estadounidense Lee Jones es uno de los profesionales que han dado el salto de su explotación familiar tradicional a un proyecto de producción marcado por la innovación, la relación con la gastronomía y la visibilidad en las redes sociales.

"Me adhiero a las redes con una cuentas reglas claves de la vida", explica a Efeagro, "sé auténtico en todo lo que hagas (que genera confianza y resuena en tu audiencia), transparente (que fomenta la credibilidad y el sentido de comunidad) y honesto".

Jones considera que la difusión de "contenidos educativos sobre prácticas agrícolas pueden ser una forma eficaz de educar al consumidor sobre la realidad de los alimentos y la agricultura" y propone "utilizar la narración de historias para compartir relatos sobre la conexión entre los alimentos y la comunidad, y destacar el papel de los agricultores como administradores de la tierra".

Esa relación entre alimentos y comunidad se extiende sin fronteras, y no entiende de geoestrategia o divisiones políticas.

La Fundación para el avance de las ciencias agrícolas (TAAS) es un "Think Tank" indio que reivindica tanto el conocimiento y la investigación agrícola como su difusión, de modo que se unan para garantizar "la seguridad alimentaria" y la "sensibilización" del público en torno a esta cuestión.

Su presidente, el Dr. Raj Paroda -quien entre sus hitos profesionales está a creación de los bancos genéticos alimentarios en La India- detalla que el objetivo es aprovechar el potencial de la ciencia agrícola para el bienestar de la población.

"Para garantizar la seguridad alimentaria del planeta es esencial realizar esfuerzos continuos en materia de investigación e innovación agrícolas para el desarrollo y difundir eficazmente la tecnología y los conocimientos", señala.

Concreta sus criterios de cara a las redes sociales: "Ser informativo y preciso; dar información basada en hechos y en pruebas científicas; mantener un tono respetuoso y fomentar el diálogo constructivo (abstenerse de utilizar un lenguaje incendiario); reconocer las diversas perspectivas y evitar las soluciones únicas; utilizar un lenguaje claro y accesible y que sea interactivo".

Y junto al marketing del miedo del que advierte Mulet y el sentido común que reclama Nestle, Paroda nos ofrece una última clave para ser un consumidor de redes sociales inteligente: "cuidado con las fuentes sesgadas que promueven una agenda particular. Verifique la información de forma independiente, basándose en fuentes creíbles. Preste atención a las credenciales y la reputación de los autores".

Cerrar

Inicia sesión con email

He olvidado mi contraseña