Sorli ha invertido 1 millón de euros en su flagship de la calle Minería, 1, de Barcelona para adaptarlo a su nuevo modelo comercial, siendo el primero de esta ciudad en organizarse según el mismo. A lo largo de este año, la enseña realizará siete reformas más.

Con una superficie de más de 1.500 metros cuadrados de sala de ventas y 31 trabajadores, este establecimiento ofrece una nueva distribución de los productos por categorías definidas en función de las necesidades del cliente para la que se ha invertido en nuevas cámaras de frío, pavimento, cajas, luces, estantes y rotulación.

Otra de las novedades es la incorporación de un establecimiento SorliNyam anexo al supermercado en el que además de panadería se puede adquirir una amplia gama de productos listos para tomar dirigidos a personas que desean una alimentación de calidad, pero no disponen de tiempo para cocinar.

La inversión también contempla los costes de la actualización del supermercado a la nueva imagen de Sorli (pasando de Sorli Discau a Sorli) plasmada en una nueva identidad gráfica que refuerza valores como “el producto fresco, la proximidad, la modernidad y la vocación de servicio, así como un nuevo vestuario para el personal más moderno y cómodo”, explica la compañía.

Junto a ello, el centro ha sido dotado de nueva tecnología que optimiza la gestión de los pedidos de productos frescos con datos que permiten realizar una previsión de ventas futuras más ajustada. El supermercado mantiene la marca Sorli ‘de aquí’ con unas 100 referencias y ofrece también productos de la marca de ahorro IFA Eliges.