Aceite de oliva virgen, quesos, hortalizas y frutas son los sectores agroalimentarios que aglutinan mayor número de sellos de calidad Denominación de Origen Protegida (DOP) o Indicación Geográfica Protegida (IGP). Así lo pone de manifiesto un estudio de Eroski Consumer, que ha analizado la situación del citado sector en España (a excepción del vino, de la sidra y de las bebidas espirituosas).
En concreto, señala que 175 productos agroalimentarios contaban en 2013 con una distinción que reconocía sus atributos de calidad. De ellos, el 55% eran DOP y el 45%, IGP. Se clasificaban en 15 sectores y cuatro de ellos aglutinaban tres de cada cinco sellos de calidad otorgados en 2013 en España: aceite de oliva virgen (con 29), quesos (28), hortalizas (24) y frutas (21).
El análisis se sustenta, entre otros, en informes elaborados por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama), la empresa pública Mercasa y la asociación Origen España y concluye también que estos sellos de calidad se concentraban mayoritariamente en Andalucía (29), Cataluña (20), Galicia (18), Castilla y León (17), Castilla-La Mancha (13), Valencia (11) y Extremadura (10).
Asimismo, 3.505 industrias llevaron a cabo en 2013 el proceso de producción y elaboración de los 175 alimentos agroalimentarios con sellos de calidad: 771 en el sector de la panadería, pastelería y repostería; 761 en el del aceite de oliva virgen y 500 en el de los quesos.
Ese año, comercializaron cerca de 280.000 toneladas de producto, además de las 1.100 piezas de jamón y los 70.000 hectolitros de vinagre. Su valor económico total en el mercado nacional e internacional fue de 966 millones de euros, sobresaliendo los sectores del queso y de las carnes frescas.
Un estudio del Magrama realizado en 2014 puso de manifiesto como principales debilidades del sector el excesivo número de productos con este sello de calidad, así como su gran dispersión. Junto a ello, una insuficiente internacionalización y una baja utilización de su capacidad productiva y comercializadora, además de falta de información y comunicación al consumidor.
