Las bodegas Williams & Humbert, ubicadas en Jerez de la Frontera (Cádiz) están negociando un acuerdo de venta de parte de su accionariado al holding de bebidas The Keepers, propiedad del empresario filipino Lucio Co, el cual se prevé que esté formalizado a finales de este año.
En un comunicado, la empresa vitivinícola ha recordado que en 2018 el empresario filipino adquirió el 30 % de las acciones de Williams & Humbert, lo que ha supuesto "un fuerte impulso al plan estratégico de la compañía".
Ha aclarado que hasta ahora solo se ha presentado a Bolsa el plan aprobado por el Consejo de Administración de The Keepers Holdings Inc. para adquirir hasta el 50% de las acciones de Williams & Humbert, un plan que incluiría el 30% que la familia Co ya posee en el accionariado de la bodega.
La adquisición en 2018 de una parte de sus acciones supuso "un fuerte impulso al plan estratégico de la compañía, consolidando el posicionamiento de sus marcas y abriendo la puerta a la posibilidad de futuras inversiones por parte de la Bodega", ha recordado.
The Keepers Holdings Inc. es propietaria y operadora de Montosco Inc, Meritus Prime Distributions Inc y Premier Wine and Spirits Inc, tres de los principales actores en la distribución nacional de las principales marcas internacionales de licores y vinos.
Es el mayor distribuidor de bebidas espirituosas importadas en Filipinas, con una cuota de mercado del 74 % en términos de volumen y del 66,9 % según el valor de las ventas al por menor en 2020, según datos de IWSR Drinks Market Analysis Limited, extraídos por la bodega.
Su cartera incluye marcas como Johnnie Walker, José Cuervo, Jim Beam, Jinro y el brandy "Alfonso", elaborado por Williams & Humbert y cuya distribución en Filipinas representa el 60 % de los ingresos para este holding de bebidas propiedad de Lucio Co.
Por eso, la dirección de Williams & Humbert ha manifestado que este plan en el que aún se está trabajando "no es más que el reflejo de las excelentes relaciones que desde hace más de 20 años mantienen la familia Co y la familia Medina, quienes durante más de dos décadas han compartido valores y visión empresarial".
La relación comercial entre ambas familias se inició en el año 1999 con la importación de las marcas de Brandy de la Bodega, “1877” y “Alfonso I”, un brandy que ha ido ampliando su gama a lo largo de los años y es hoy día una de las marcas líderes en Filipinas, mercado en el que está fuertemente posicionada, según la empresa bodeguera.
