Grupo Bynsa vendió 116.350 toneladas de alimentos para mascotas en 2015, volumen que representa un crecimiento del 4,3% respecto al año anterior. Asimismo, la compañía incrementó su facturación el 1,8%, hasta los 89,1 millones de euros y su beneficio neto se situó en cinco millones de euros.

A lo largo de 2015, la compañía, con sede en Burgo de Ebro (Zaragoza), realizó inversiones por valor de 3,6 millones de euros para mejorar su eficiencia y productividad. La mayor parte se destinó al proyecto de ampliación de sus instalaciones para fabricar snacks, iniciado en 2013 y que acumula una inversión de 10 millones de euros.

Esta ampliación permitió ya en 2014 empezar a elaborar snacks para mascotas, producción que ha crecido y se ha consolidado durante 2015 y que ha propiciado que en la actualidad gran parte de estos productos sea cien por cien española y no tengan que importarse.

Paralelamente, la compañía ha reforzado la competitividad de sus instalaciones de secos, tras invertir 3,6 millones de euros en maquinaria y actualizaciones de procesos. A su vez, destinó 1,15 millones a la adquisición de un terreno anexo a su planta zaragozana.

Roger Mohr, director general del Grupo Bynsa, ha destacado la apuesta de la compañía por "la seguridad alimentaria, la calidad y la innovación", además del "esfuerzo inversor constante y el trabajo del conjunto de la plantilla" como "factores clave" para alcanzar estos resultados.