La marca propia ha dejado de ser una alternativa para convertirse en una elección consciente y consolidada. Su crecimiento no responde solo al contexto económico, sino a un cambio estructural en la forma de consumir. Ahora las personas buscan productos que combinen calidad, precio y confianza, pero también que representen valores como la sostenibilidad, la transparencia, la cercanía, y que les permitan llevar una alimentación saludable.
En Eroski entendemos la marca propia como una expresión de nuestro modelo cooperativo y de nuestra vocación de servicio a la sociedad. Es una apuesta absolutamente estratégica, ya que representa el 29% de nuestras ventas y el 39% de las unidades que comercializamos en alimentación. Su peso ha crecido un punto porcentual durante lo que llevamos de 2025 y más de un 28% en volumen desde 2021, reflejando la confianza de millones de familias que nos eligen cada día.
Ahorrar sin renuncias
Nuestra propuesta comercial se basa en ofrecer a la clientela la posibilidad de ahorrar sin renunciar a la variedad ni a la calidad. Para ello, colaboramos con más de 3.400 proveedores de gran consumo, del que el 95% son de origen nacional, y más de 2.000 pequeños productores agroalimentarios, que aportan más de 20.000 referencias de producto local. Este ecosistema nos permite ofrecer un surtido amplio, competitivo y adaptado a cada región, reforzando el vínculo entre el producto y su origen.
La marca propia seguirá siendo una de las grandes palancas de competitividad, no solo por su peso en la cesta de la compra, sino porque refleja los valores que las personas buscan hoy en una empresa
La convivencia entre marca propia y de fabricante es, en realidad, la esencia del actual modelo de gran consumo. Las marcas de fabricante aportan innovación, reconocimiento y valor añadido, mientras que la marca propia refuerza la identidad del distribuidor, fideliza y ofrece una respuesta directa a las necesidades de ahorro. Ambas conviven de forma complementaria, creando una oferta más equilibrada, rica y atractiva para las personas consumidoras.
En Eroski trabajamos para que nuestra marca propia evolucione hacia un modelo aún más sostenible, saludable y accesible. Más de 1.700 productos incluyen ya el sistema Nutri-Score, cerca de 250 son aptos para personas con intolerancias alimentarias y avanzamos en el uso de envases más sostenibles. Todo ello con un mismo propósito, el de democratizar el acceso a un consumo responsable, donde la sostenibilidad y la salud no sean un privilegio, sino una opción al alcance de todos.
El futuro del gran consumo pasa por la colaboración, la eficiencia y la capacidad de escuchar a las personas consumidoras. La marca propia seguirá siendo una de las grandes palancas de competitividad, no solo por su peso en la cesta de la compra, sino porque refleja los valores que las personas buscan hoy en una empresa: confianza, compromiso y coherencia.
En Eroski seguiremos apostando por ello, porque creemos que ofrecer productos de calidad, a buen precio y con propósito es la mejor forma de construir relaciones duraderas y generar valor compartido para toda la cadena.
Beatriz Santos
(*) Tribuna incluida en el Anuario Perspectivas FMCG 2026 de FRS, que incluye el Especial Marcas de Distribución (con el Top 300 de Productores).
