Según el informe “Las bebidas refrescantes y su impacto socioeconómico en España”, elaborado por la escuela de negocios IESE, este sector de la industria de bebidas aportó a la economía española una facturación de más de 12.000 millones de euros, dato a ejercicio 2011.

Durante la presentación del estudio en Madrid, el presidente de la Asociación de Bebidas Refrescantes (Anfabra), Fernando Amenedo, explicó que este sector genera más de 63.000 empleos, entre directos e indirectos, donde la antigüedad media de los trabajadores es de 14 años.

Amenedo añadió que la industria de bebidas refrescantes contribuyó en 2011 al sector público con cerca de 550 millones de euros, lo que confiere al sector un “papel clave” en la activación del consumo en España. A pesar de los buenos datos ofrecidos, la industria facturó cerca del 8% menos en el último ejercicio presentado.

El informe explica que durante los últimos diez años, el consumo de productos light ha pasado del 15% al 30%. También destaca el aumento del consumo de bebidas destinadas a deportistas, pese a ser “relativamente jóvenes en el mercado”. Además, los clientes optan cada vez más por el formato “litro y medio o dos litros”.

En España, cerca de 13 millones de hogares incluyen en su cesta de la compra bebidas refrescantes, lo que supone, sumado al consumo en hostelería (239.191 establecimientos), un total de casi 37 millones de españoles-consumidores.

Por regiones, en una clara correlación con su atractivo turístico y sus temperaturas, la radiografía muestra que Madrid, Andalucía, Murcia y Baleares son las regiones que presentan mayor consumo a nivel nacional. “El 75% de los españoles prefiere bebidas refrescantes en la compañía de amigos y fuera de casa, en bares, cafeterías y restaurantes”, explicó Amenedo.

Además, el sector es líder en “gestión eficiente” de envases. Así, los datos de reciclaje de latas en España desvelan una tasa de retorno del 82%, frente al 65% de la media europea.