Los productos frescos han sido los más demandados durante esta Navidad (entre los días del 11 al 31 de diciembre). En concreto, los productos de charcutería (embutidos y quesos), los mariscos y pescados y las carnes representaron el 20% de la facturación en alimentación en grandes superficies, el 9%, el 5% y el 6,5%, respectivamente.

Según el estudio realizado por Cognodata Consulting, los días 23 y 30 de diciembre son los que mayores picos de venta registran, debido al carácter perecedero de estos productos. De hecho, la venta conjunta de estos dos días representa al equivalente de medio mes fuera del periodo navideño.

Los pescados y mariscos son los que registran un mayor incremento de las ventas en estos días, debido a su corta fecha de caducidad; mientras que, en los productos de charcutería (embutidos y quesos), el aprovisionamiento es más paulatino y se adelanta al último fin de semana de noviembre para ir aumentando de forma constante hasta el 23 y repuntar de nuevo el día 30. En carnicería, por último, el 23 y el 30 siguen siendo los días de mayores ventas, aunque no son tan representativos como ocurre en el caso de la pescadería.

En cuanto a las ventas, el mayor incremento lo han experimentado los pescados y mariscos, consiguiendo especialmente en el último tramo de diciembre triplicar la venta de un periodo comparable fuera del periodo de Navidad. Este aumento se debe tanto a la duplicación del número de tickets como al gasto medio de cada ticket, que supone el 60% más respecto a un periodo comparable fuera de estas fechas.

El conjunto de los productos de charcutería (embutidos y quesos) ha facturado 2,5 veces más en el periodo de Navidad debido, en este caso, a un incremento del 75% en el gasto medio de la compra y a un aumento del 40% en el número de tickets.

La venta de productos de carnicería sigue un patrón parecido al de la pescadería. Su venta se ha incrementado el 75% debido tanto al aumento del 33% tanto en el número de tickets como en la subida del gasto.