La empresa valenciana Helados Estiu cerró el ejercicio 2021 con un beneficio neto de 5,4 millones de euros tras facturar 88 millones de euros (frente a los 75 del año anterior) y vender 33 millones de litros de helado.

Durante ese año, la empresa reinvirtió 13 millones en la nueva fábrica de Cheste, construida en 2020 con un coste de 31 millones de euros, según ha informado la empresa.

La heladera valenciana, presente en más de 20 países, consolidó el año pasado 71 nuevos puestos de trabajo, lo que supone un incremento de un 36 % respecto al 2020, llegando a 266 el número de empleados.

La construcción de la fábrica de Cheste en 2020 (y su posterior reinversión en 2021) y la consolidación de la de Ribarroja del Túria, ha sido clave para los buenos resultados, han indicado fuentes de la empresa.

En el ejercicio actual, las principales dificultades a las que Helados Estiu ha tenido que hacer frente han sido los precios al alza de las materias primas en un mercado muy tensionado y un incremento constante en los costes de energía y logística.

Helados Estiu, proveedora de Mercadona, "no ha dejado de invertir y ha trabajado para repercutir lo mínimo posible estos incrementos de coste en el consumidor", han indicado fuentes de la empresa.

Como principal novedad de 2022, se ha introducido el 'mini-boom', un helado con sabor a leche tostada, cobertura de avellana y galleta troceada que está teniendo un gran éxito entre los consumidores.

Entre los objetivos de Helados Estiu para los próximos ejercicios figura seguir mejorando los parámetros relacionados con el Medio Ambiente, la Calidad y la Seguridad Alimentaria.

"El crecimiento sostenible es una premisa y en estos momentos se está trabajando en un sistema de gestión energética para reducir su consumo, así como en una plantación fotovoltaica tanto en Cheste como en Ribarroja del Turia", han resaltado las fuentes.