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Auchan inaugura Auchan Go, su tienda autónoma sin cajas
Una sala de reuniones en la sede de social del grupo Auchan cerca de París acaba de convertirse en una tienda "inteligente" de última generación. Bajo el nombre Auchan Go le lab, abrió sus puertas el 25 de abril. Sus propios empleados serán los clientes que la testen.
Auchan está decidida a ofrecer a sus clientes experiencias de compra superiores de la mano de la tecnología. Su ambiciosa apuesta por la compra online es bien conocida, pero tampoco quiere quedarse atrás en la digitalización y automatización de la tienda física.
Auchan Go le lab es el nombre de su proyecto piloto, para el que ha pedido el apoyo de sus propios empleados con la idea de mejorar los procesos y conocer el surtido ideal. La tienda, de 86 metros cuadrados, cuenta con más de mil referencias, siendo casi la mitad del surtido de marca propia.
Acceso a Auchan Go
El cliente puede abrir la puerta utilizando el código QR presente en su aplicación móvil Auchan, pero también puede acceder presentando su tarjeta de crédito o débito, en su primera visita, y dejando un correo electrónico (para el envío de su recibo). Esta innovación permite que las compras sean aún más intuitivas y convenientes para más clientes.
Auchan Go le lab está en la sede central de Auchan, cerca de París.
Basile Guérin, director de Innovación de Auchan Francia, en declaraciones a LSA, ha subrayado el deseo de Auchan de que fuera posible ingresar en el establecimiento sin que sea imprescindible tener que descargar la app. La solución puede verificar la solvencia del cliente como paso previo a dejarle entrar. Para desarrollar esta funcionalidad, ha trabajado con las empresas Wordline y Upstream.
Soporte tecnológico de Trigo
Como su apelativo "le lab" indica, Auchan Go le lab se trata de un centro de investigación e innovación que cuenta con el soporte tecnológico de la startup israelí Trigo. Su CEO, Michael Gabay, se presenta como “el único socio tecnológico con capacidades comprobadas para modernizar y transformar tiendas de gran formato en tiendas inteligentes y autónomas”.
Cada ítem se coloca en góndolas que funcionan como una báscula y permiten saber cuándo un artículo está colocado, reposado o incluso mal reposado, ya que el peso de cada referencia ha sido registrado previamente en el sistema antes de llegar a las estanterías.
Entre estas básculas inteligentes y la detección de movimiento habilitada por las 138 cámaras que ocupan todo el techo de la tienda, la tienda puede entender todas las interacciones del cliente y lo que pone en su cesta. De esta forma, podrá saltarse la etapa de cobro y salir con sus compras. En pocos minutos recibirá un resumen de su factura en su aplicación móvil o por correo electrónico.
De momento parece que no hay planes de expansión para este modelo de tienda. Primero Auchan quiere superar la curva de aprendizaje.
