No está viviendo actualmente Codorníu unos días sencillos. A la tensión que se vive en Cataluña (con amenaza de boicot a sus productos desde hace unas semanas) se le suma el malestar de un grupo de accionistas de la compañía, los cuales no están contentos con la gestión del actual Consejo de Administración.
Según informa El Economista, un grupo de 33 accionistas se volvió a rebelar contra la empresa controlada por los herederos de Manuel Raventós votando en contra, durante la última junta, de la "gestión social desempeñada por el Consejo de Administración de la sociedad durante el ejercicio cerrado a 30 de junio de 2016".
Estos accionistas representan el 20,27% del capital presente en la junta. La situación no es nueva, puesto que en la junta anterior un grupo de 47 accionistas ya mostró su rechazo por la labor del Consejo.
La empresa actualmente está presidida por María del Mar Raventós Chalbaud, quien ocupa el cargo desde 1998. La compañía ha indicado a la citada publicación que "es normal que haya una parte de los accionistas que haya votado en contra".
Las últimas semanas, además, no están siendo fáciles para Codorníu al verse implicada sin quererlo en el proceso independentista de Cataluña. Todo por el registro, el martes 19 de septiembre, de la empresa Unipost por su presunta participación en el referéndum del 2 de octubre, la cual han vinculado con la compañía de cava.
Codorníu niega su vinculación con Unipost y su participación en el proceso soberanista pic.twitter.com/MKdtBuc1PG
La propia Condorníu emitió un comunicado negando tener vinculación con Unipost. Aseguraba, además, que ninguna de las empresas que forman el grupo ha participado ni participa en la distribución de propaganda, notificaciones para las mesas electorales ni, en general, en el proceso soberanista. "No hacemos política", señalaba la empresa.
"No hacemos política"
Además, Codorníu presentó una denuncia por delito de calumnias ante la Unidad de Delitos Económicos (Udef) de la Policía Nacional por difusión en Internet de varias noticias falsas y calumniosas que la vinculaban con el proceso soberanista.
La Federación Española del Vino (FEV) mostró su apoyo y defensa a Codorníu tras recibir amenazas de boicot a sus cavas y vinos. "Consideramos que no es justo que por rumores o cuestiones puntuales se incite en contra del consumo de ciertos productos. Apoyamos y defendemos a cualquiera de nuestras bodegas, pero por ahora ninguna nos ha trasladado nada ni oficial ni oficiosamente", indicó el director general de la FEV, José Luis Benítez, al tiempo que subrayó que las "redes sociales magnifican los temas".
