Comprar una botella de agua en el aeropuerto ya no costará una barbaridad, como venía sucediendo hasta ahora. Aena se ha comprometido a limitar en los aeropuertos que gestiona los precios de venta de esta bebida en las máquinas expendedoras, con lo que costarán, como máximo, 1,60 euros por unidad, según consta en la memoria de actividad del Defensor del Pueblo.

Además, la compañía también pretende instalar fuentes de agua potable a disposición de los viajeros.

Estas medidas llegan después del aluvión de quejas recibidas por los precios excesivos de algunos productos básicos, sobre todo del agua, en los aeropuertos españoles. El Defensor del Pueblo abrió una investigación que se dio por concluida cuando Aena asumió los citados compromisos.

Según recoge este documento, los viajeros también protestan por la pérdida de espacio público en los aeropuertos, debido a la tendencia a transformarlo en áreas comerciales para maximizar la rentabilidad, obligando a los pasajeros "a transitar los aeropuertos por el interior de los establecimientos comerciales", detalla el Defensor del Pueblo que aún mantiene actuaciones abiertas a este respecto.