Islazul continúa promoviendo la eficiencia energética como uno de sus principales valores. Las medidas que desde hace tres años ha implantado al respecto este centro comercial y de ocio de Madrid le ha llevado a lograr un ahorro en consumo de agua del 18% y un 13,4% en consumo de energía que, además, es verde y procede de fuentes renovables.
Uno de los elementos diferenciadores que destaca la compañía, sometida recientemente a un proceso de rebranding, ha sido la instalación de un jardín vertical, de 300 m2, compuesto por más de 10.000 plantaciones que cubren la fachada principal del centro. A ello se une la cubierta translucida de casi 10.000 m2, compuesta por un material de alta tecnología llamado ETFE (un tipo de polímero termoplástico de gran resistencia al calor, a la corrosión y a los rayos UV), que permite la entrada de luz y ventilación natural.
Un jardín vertical de 300 m2 y 24 puntos de recarga para coches eléctricos, diferencian a este centro comercial de Madrid
Además, este centro comercial ha habilitado en su parking 24 puntos de recarga destinadas a coches eléctricos, a los que se suman otros dos para motos del servicio de seguridad del centro (100% verdes). Estos nuevos puntos de recarga, junto con la planta termosolar para uso en zonas comunes y restauración, forman parte de la implantación de medidas ecológicas que favorecen el uso de energías limpias y que reducen también la emisión de CO2.
Todas estas implementaciones, junto a la sustitución de la iluminación por lámparas y tubos LED, entre otras iniciativas dirigidas a la eficiencia energética, han logrado reducir las emisiones a la atmósfera en más de 677.00 kg en los tres últimos años.
Islazul fue el primer edificio de uso comercial en obtener el sello Breeam (Building Research Establishment Environmental Assessment Methodology), el método de evaluación de la sostenibilidad en la edificación técnicamente más avanzado. En la actualidad cuenta con una doble calificación de Excelente en la escala de este análisis de referencia internacional, tanto en el apartado que evalúa los elementos constructivos del edificio, como en las políticas y procedimientos que son aplicados en su gestión diaria.
