Mercadona y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) han iniciado una colaboración para mejorar la seguridad y calidad de los productos de la pesca por medio de la investigación de sus parásitos.
Para ello, el Instituto de Investigaciones Marinas en Vigo (IIM), a través del grupo de investigación Ecobiomar y de su Unidad Técnica de Biobanco, se encargará de analizar el comportamiento de los parásitos, especialmente del anisakis. Este estudio permitirá a la enseña trasladar las conclusiones obtenidas a la gestión de sus productos de pesca con el objetivo de "consolidar una cadena confiable y mejorar la calidad y servicio que ofrece a sus clientes", informa la compañía valenciana.
El proyecto se centrará en el análisis de las especies que proceden de sistemas productivos de pesca del Atlántico Noreste
En concreto, el proyecto se centrará en el análisis de las especies que proceden de sistemas productivos de pesca del Atlántico Noreste, y contará con la implicación de seis proveedores especialistas de pescado de Mercadona: Riveira Peixe Fresco, Posa, Mascato, Mastter, Abroma Fishing y Castletownbere Fishermen’s Co-Op.
"Con esta iniciativa, el organismo público de investigación y la empresa de distribución alimentaria aúnan esfuerzos, intereses y conocimientos con el cometido de trasladar toda la evidencia científica al producto para mejorar la excelencia de servicio al cliente, reduciendo la presencia del parásito en los lotes comerciales y capitalizando la organización mediante la educación sanitaria de sus empleados y de sus clientes", explican Ángel F. González y Santiago Pascual, científicos del IIM-CSIC.
La colaboración entre ambas entidades se articula a través de un contrato de apoyo tecnológico con una duración inicial de un año, que se inicia en el mes de septiembre de 2018 con posibilidad de prórroga.
FASES DEL PROYECTO
La finalidad del proyecto es generar conocimiento, analizarlo y distribuirlo a través de un sistema eficiente que permita a Mercadona implantar una plataforma de gestión de datos sobre riesgos asociados a parásitos en el pescado. Para alcanzar este objetivo, se contemplan cuatro fases.
La primera, auditoría del producto a través de la aplicación de nuevas metodologías de detección en la fracción de stock explotado. La inspección de parásitos en origen será realizada por los proveedores de pescado de la enseña, cuyos técnicos han sido previamente formados por el IIM-CSIC.
La segunda fase se inicia una vez finalizado el plan de vigilancia epidemiológica. Personal del IIM analizará dichos resultados mediante herramientas bioinformáticas y modelización bioestadística para conocer la identidad del riesgo y los parámetros que inciden en la presencia de parásitos en sus lotes.
El IIM diseñará un árbol de decisión para categorizar el riesgo en los lotes comerciales
Posteriormente, el IIM diseñará un árbol de decisión para categorizar el riesgo en los lotes comerciales y los puntos críticos de control.
Por último, desde el Instituto de Investigación también se desarrollará una herramienta de auto-aprendizaje dirigida a varios actores de la cadena de suministros de Mercadona.
