Diageo ha puesto en marcha un programa de recorte de costes de 500 millones de dólares (unos 444,6 millones de euros) para reducir su deuda, al tiempo que el gigante de las bebidas alcohólicas ha informado de un aumento de sus ventas impulsado por el acaparamiento de los distribuidores estadounidenses en previsión de los aranceles del presidente Trump, informa Financial Times.
El fabricante de Johnnie Walker y Guinness se ha visto presionado por los inversores para reducir sus costes y su apalancamiento, ya que la lentitud de la demanda ha afectado a las ventas de alcohol y las preocupaciones sobre la caída del consumo de este producto han pesado sobre el precio de las acciones de la compañía.
En los tres primeros meses del año, las ventas netas de Diageo aumentaron el 2,9%, hasta 4.400 millones de dólares (3.945 millones de euros), mientras que las ventas en EE.UU. crecieron el 5,9%, gracias a que los minoristas se abastecieron de bebidas espirituosas importadas.
IMPACTO DE LOS ARANCELES
En febrero, Diageo descartó su objetivo de crecimiento de las ventas a medio plazo de entre el 5% y el 7%, achacándolo a la incertidumbre sobre los aranceles estadounidenses y a la débil demanda en mercados clave.
Ahora, la empresa ha reducido el impacto estimado de los aranceles en sus beneficios operativos a 150 millones de dólares anuales (133,3 millones de euros) frente a los 200 millones de dólares (177,8 millones de euros) pronosticados con anterioridad.
La compañía ha incidido en que su recorte de costes generará unos 3.000 millones de dólares (2.667,6 millones de euros) en flujo de caja libre cada año a partir de 2026 y confía en volver a su objetivo de apalancamiento en 2028.
