El presidente de Ebro Foods, Antonio Hernández Callejas, ya adelantaba en el pasado Congreso Aecoc de Valencia que su compañía estaba teniendo un buen ejercicio 2017. Las previsiones se han confirmado después de que Ebro haya dado a conocer las cifras de todo el año pasado, que se resumen en un beneficio neto de 220,6 millones de euros, un 30% más que en el año 2016. "Cerramos un ejercicio muy satisfactorio, con la mirada puesta en seguir afianzando durante 2018 el liderazgo en nuestras áreas principales", adelanta la empresa.
Este resultado es debido fundamentalmente al impacto positivo de la reforma fiscal aprobada recientemente en Estados Unidos, que ha supuesto actualizar los impuestos diferidos netos a un nuevo tipo, que pasa del 35% al 21%, indica Ebro en un comunciado.
El importe neto de la cifra de negocio, influido por la positiva evolución de la división arrocera, se eleva un 1,9% respecto del año anterior, hasta los 2.507 millones de euros.
El Ebitda crece un 4,3%, situándose en 359 millones de euros. El Ebit, por su parte, alcanza los 279,3 millones de euros, un 4,5% superior al del ejercicio anterior.
La deuda neta, a 31 de diciembre de 2017, tras las importantes inversiones realizadas en crecimiento orgánico e inorgánico, ascendería a 517,1 millones de euros, un ratio de 1,4 veces Ebitda, que supone "un bajo nivel de endeudamiento para seguir afrontando con holgura posibles operaciones de desarrollo orgánico e inorgánico", comenta la compañía.
En su balance, Ebro Foods destaca que los resultados obtenidos muestran "la buena salud de los negocios del grupo, el acierto de las inversiones realizadas para el crecimiento orgánico e inorgánico de la compañía, la sintonía que las distintas sociedades del grupo mantienen con sus clientes y consumidores gracias a una actitud permanente de escucha para atender a las nuevas tendencias y satisfacer sus necesidades, y el éxito de una estrategia que sitúa a la innovación como principal motor de crecimiento".
"Hemos tenido acierto en las inversiones realizadas para el crecimiento orgánico e inorgánico de la compañía"
Y añade: "Durante 2017 hemos consolidado el posicionamiento de todas nuestras grandes marcas en el segmento del healthy food; hemos reforzado nuestra recién creada división eco con las incorporaciones de Vegetalia y BIA; hemos avanzado en la diferenciación de nuestro portfolio con la incorporación de la compañía italiana Geovita, y hemos aumentado cuotas de mercado en los países más relevantes en que estamos presentes".
Arroz y pasta
En su área de arroz, Ebro apunta que la división ha evolucionado muy satisfactoriamente apoyada en el buen comportamiento de los negocios, tanto europeos como norteamericanos. "En Europa hemos asistido al lanzamiento de más de 80 productos ligados a los conceptos de salud y convenience. En lo que respecta a España destacamos el buen comportamiento de los aromáticos y las especialidades Sundari, la nueva gama de granos saludables de SOS Vidasania y las mezclas de legumbres y granos de Brillante Benefit", añade.
La cifra de ventas se sitúa en 1.345 millones de euros y el Ebitda alcanza los 206 millones.
Por otro lado, la división de pasta registra una positiva evolución que "podría haber sido sido mejor, de no ser por el repunte de precios de materia prima experimentado en Europa y Norteamérica durante el verano. En este contexto, Panzani ha logrado mantener una evolución satisfactoria en las categorías de mayor valor añadido. Garofalo, por su parte, ha seguido creciendo a doble dígito, afianzando su posicionamiento premium y ha comenzado su distribución en Estados Unidos a través de nuestra sociedad Riviana.
La cifra de ventas se sitúa en 1.218,4 millones de euros y el Ebitda en 163 millones.
