Más de 1.180 industrias de porcino españolas se ubican en municipios de menos de 5.000 habitantes, donde generan más de 24.000 empleos directos, lo que supone el 35% del empleo total de la industria porcina, según los datos elaborados por la Interprofesional del Porcino de Capa Blanca (Interporc).
Entre 2008 y 2018 el número de este tipo de industrias que se encuentran en municipios de menos de 5.000 habitantes se ha incrementado en más del 13%. Este crecimiento es más significativo en regiones como la Comunidad Valenciana, en la que ha subido el 30% y en la que hoy se ubican 52 industrias de porcino. Le siguen: Andalucía con 167 industrias (16% más respecto a 2008); y Castilla y León, con 285 industrias y un crecimiento del 15,4%.
También son significativos los incrementos del número de industrias de porcino en los municipios rurales de Castilla-La Mancha, con 123 (12,8%); Galicia con 62 (12,7%); Cataluña con 249 (10,7%); y Aragón con 96 (4,35%).
Esta vinculación de la industria porcina con las zonas rurales se suma a las más de 37.000 granjas de producción que están en municipios de menos de 5.000 habitantes, "lo que evidencia el carácter esencial del sector porcino y su efecto directo en la economía de estos pequeños municipios donde el sector porcino genera empleo estable y contribuye a evitar la despoblación", subraya la Interprofesional.