La destilería francesa Pernod Ricard registró un beneficio neto atribuido de 1.569 millones de euros en su primer semestre fiscal, lo que equivale a un retroceso del 12,4% respecto del mismo periodo del ejercicio anterior.
Pese a la caída de sus ganancias, las acciones de la compañía se han revalorizado el 1,78% en la Bolsa de París.
Por su parte, la facturación retrocedió el 7,4%, hasta los 6.590 millones de euros. En cifras orgánicas, excluyendo el impacto del tipo de cambio y de las variaciones en el perímetro contable de la empresa, la facturación de la compañía gala registró un descenso anual del 3%, en lo que el propietario de marcas como Beefeater, Absolut o Jameson ha calificado aun así de unos seis meses de resultados "robustos" y enmarcados en una "normalización" del mercado.
En este sentido, las ventas de Pernod Ricard en América durante el semestre sumaron 1.860 millones de euros, el 7,2% menos en cifras absolutas (7% menos orgánico), mientras que en Europa ingresó 1.880 millones de euros, el 5,4% menos (-4%), y en Asia y el resto del mundo un total de 2.850 millones de euros, 8,7% menos (+1%).
Ya solo en el segundo trimestre, los ingresos fueron de 3.548 millones de euros, el 6,8% menos. "Conseguimos una fuerte expansión del margen bruto por las importantes medidas de fijación de precios, gracias al poder de nuestra cartera premium", ha declarado el presidente y consejero delegado, Alexandre Ricard.
PREVISIONES
De cara al medio plazo, la destilería confía en que las ventas netas suban entre el 4% y el 7%, así como una mejora del margen operativo orgánico de 50 a 60 puntos básicos.
En el ejercicio en curso, "en un entorno desafiante", Pernod Ricard espera registrar una estabilización de las ventas orgánicas. Asimismo, llevará a cabo una recompra de acciones propias de 300 millones de euros, de los que 150 millones ya han sido ejecutados en el semestre.
