Los españoles gastaron más de 28.000 millones de euros en comer y beber fuera de casa en 2021. La cifra es imponente y sirve de complemento al dinero que gastaron en total en alimentación, que superó los 100.000 millones de euros.

Pese a la grandilocuencia de la cifra, el detalle guarda algún que otro motivo que puede ser de interés del sector horeca. El 'Informe del Consumo Alimentario en España en 2021' que presentó este jueves el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación refleja la mejora del consumo en volumen y valor con respecto a 2020, un año extraordinario en términos de consumo, si bien también se observa una recuperación incompleta con respecto a 2019.

El gasto en comparación con 2020 creció un 23%, aupado por una mejora del consumo (10%) y del aumento de los precios (11,6). No obstante, este dato es contradictorio si se mira a 2019, ya que el consumo de este 2021 fue un 31% más bajo, mientras que los precios son un 13% más altos. En consecuencia, el gasto de 2021 se encuentra un 22% por debajo del de 2019.

Eso significa que, de media el gasto fuera de casa alcanza los 814 euros, por encima de los 667 de 2020 pero por debajo de los 1.060 de 2019. La mayor parte de dicho gasto corresponde a la comida, que alcanza los 62 30 kilos al año.

Una vez se acercan en los establecimientos fuera de casa, ¿qué es lo que más consumen los españoles? ¿En qué se gastan más dinero? Como ocurre con varios de los datos de este informe, las respuestas se invierten. El 67% del consumo es bebida, mientras que el coste de dichas bebidas apenas alcanza el 36%. Por el contrario, la comida en sí representa el 32% restante en volumen y supone el 64% del gasto.

Con esos datos en la mano, el informe refleja el regreso de los consumidores a los bares y restaurantes. Si en 2020 se redujo en 10 puntos el consumo en los establecimientos (de 74% en 2019 a 64% en 2020), en 2021 el porcentaje volvió a elevarse al 69%, lo que consolida los locales como el lugar preferido para consumir fuera de casa.

¿Dónde? Principalmente en bares, cafeterías y cervecerías, aunque los restaurantes y los locales de fast food recuperan terreno. Muy por debajo quedan establecimientos de distribución, pastelerías y panaderías o estaciones de servicio.