Entre junio de 2012 y julio de 2013, el consumo de bebidas refrescantes en los hogares españoles se situó en 41,68 litros por persona y año, lo que supone un descenso del 2,1%, según se desprende de un estudio del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.

El canal dinámico (híper, súper y tiendas de descuento) vende nueve de cada diez litros, mientras que la tienda tradicional continúa el descenso de sus ventas.

Por tipo de bebidas, los refrescos de cola representan el 52% del total del volumen consumido en el periodo. Le siguen los sabores cítricos, con el 21,1%: naranja (14,4%) y limón (6,7%).

En cuanto a las variedades de colas, la más consumida es la normal (53,4%), seguida de la cola light (33,1%), variedad que creció el 2% respecto de los doce meses anteriores. La cola sin cafeína disminuyó el 1,6% y la cola light sin cafeína, a pesar de ser la variedad menos consumida, creció el 2,2%.

El estudio constata que los hogares españoles destinan a las bebidas refrescantes el 2,3% del presupuesto para alimentación, un gasto que ha disminuido el 1,5% debido a la estabilización del precio medio.