La polémica sobre el etiquetado y la inclusión descontrolada de carne de caballo en productos cárnicos apenas ha tenido impacto en el mercado español, así lo revela el informe elaborado por la consultora Kantar Worldpanel, líder en investigación basada en paneles de consumo, que compara el consumo de las diez semanas posteriores a la publicación del informe por parte de la OCU respecto a las mismas semanas del año 2012.

Así pues, en la mayor parte de los casos el consumidor no ha modificado sus hábitos de compra de productos cárnicos, y sólo se ha producido una caída en algunos mercados específicos más directamente relacionados con la polémica, como la carne procesada de vacuno (hamburguesas, carne picada…) y los platos gratinados congelados tipo canelones o lasañas. La demanda en volumen de estos dos productos ha caído el 6,4% respecto al año anterior, cuando antes de que estallara la noticia venían creciendo en torno al 13%.

Según César Valencoso, Consumer Insights Consulting Director de Kantar Worldpanel, "el impacto, por tanto, se puede calificar de moderado, al igual que lo ha sido en el mercado francés, claramente por debajo del que ha producido en otros países del entorno como Reino Unido, donde algunas de las categorías llegaron a caer hasta el 40%".