La multinacional suiza Nestlé ha anunciado que, a lo largo de este año 2023, seguirá trasladando a los consumidores subidas en los precios de sus productos alimenticios con el fin de compensar el aumento de los costes de producción.
Así lo ha declarado el presidente ejecutivo de la compañía, Mark Schneider, al diario alemán Frankfurter Allgemeine Zeitung, precisando que estos incrementos no serán tan pronunciados como lo fueron en 2022. "Pero tenemos que ponernos al día durante todo el año", ha matizado.
A lo largo de los primeros nueve meses del pasado ejercicio, el grupo suizo, fabricante de Nescafé y KitKat, registró un crecimiento orgánico de las ventas del 8,5%, lo que supone un aumento de 7,5 puntos porcentuales de los precios.
MOVIMIENTOS EN CANADÁ Y EE.UU.
Por otra parte, la semana pasada, la filial canadiense de Nestlé reveló sus planes para cerrar gradualmente sus operaciones de comidas congeladas y pizzas en este país a lo largo del próximo semestre. La compañía afirmó que este movimiento tiene por objeto concentrarse en áreas con potencial de crecimiento comercial a largo plazo.
En este sentido, la firma impulsará las categorías de dulces, café y bebidas, helados, alimentos y suplementos para bebés, productos de ciencias de la salud, servicio de alimentos, aguas premium y alimentos para mascotas.
Asimismo, Nestlé Health Science ha anunciado recientemente una inversión de 43 millones de dólares para aumentar el tamaño de su planta de fabricación en Eau Claire, Wisconsin (EE.UU.). La compañía añadirá dos líneas de producción para mejorar su fabricación de productos de consumo listos para beber.
