La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) y la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) se han unido al proyecto europeo que pretende conseguir que la indicación del origen de los alimentos sea obligatoria en el etiquetado.
Se trata de una Iniciativa Ciudadana Europea cuyo objetivo, en palabras de Enrique García, portavoz de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) es “conseguir que el origen se indique en el etiquetado de manera obligatoria para todo tipo de productos de alimentación”.
García ha explicado en un encuentro con los medios que la indicación del origen es obligatoria en la mayoría de los productos frescos, la miel y la leche, “pero en el momento en que se añade algún procesado, la indicación del origen desaparece”.
“Tanto los consumidores como los productores quieren que se conozca el origen de los productos, son la industria y la distribución quienes no quieren. Únicamente citan el origen cuando les interesa comercialmente, y en muchas ocasiones la indicación es confusa o directamente engañosa”, añade el portavoz.
Como muestra del interés de los consumidores en esta información, una encuesta de la OCU señala que el 59% de los consumidores considera muy importante conocer el origen de los alimentos, incluso por encima de la marca, y están dispuestos a pagar hasta el 10% más si conocen este dato. El 73% de ellos identifica origen con país y solo el 36% se conforma con saber si un alimento procede o no de la UE.
Los productores se unen al interés del consumidor
Montse Cortiñas, vicesecretaria general de UPA, ha destacado la importancia para agricultores y ganadores de que el consumidor conozca el origen de los productos que compra: “Los productores en España cumplimos normas sanitarias y de calidad muy estrictas y vemos que en muchas ocasiones el consumidor no lo llega a saber. Esto supone una pérdida de valor importante. En nuestro país se producen grandes alimentos, de gran calidad y seguridad, y queremos que hacer las cosas bien se valore”.
Por ello, UPA se ha sumado a la campaña, que se ha denominado “Eat Original”, junto con organizaciones de Francia, Italia, Grecia, Francia, Alemania, Polonia y Portugal. La iniciativa tiene como objetivo conseguir un millón de firmas en toda Europa para instar a la Comisión Europea a legislar en esta dirección y convertir el etiquetado de origen, hasta ahora voluntario, en obligatorio.
UPA y OCU esperan recabar en España más de 40.000 firmas, tanto online (con su consiguiente sistema de verificación, en la página web habilitada al efecto) como presencialmente, aprovechando sus reuniones sectoriales y ferias a las que acudan.
