El auge de los pagos con tarjeta o con el móvil ha sido impulsado, en gran medida, por la pandemia de la covid-19 y la digitalización del comercio y la hostelería.

Según el último estudio de `Mastercard´, recogido por HosteleríadeMadrid, el 67% de las compras en España se han realizado con tarjeta en los últimos meses; además, más de 40% de la población prefiere utilizar las billeteras digitales de los móviles para realizar los pagos.

Otro aspecto que ha cambiado ha sido el de exigir un pago mínimo, que ha ido desapareciendo, en parte porque la comisión ronda sólo el 0,4% de la compra, por lo que no afecta en gran medida el beneficio de los locales.

También el punto de las propinas se ha modificado. Ahora, algunos establecimientos y servicios de reparto a domicilio comienzan a incorporar las propinas a sus pagos digitales con un software de TPV.

BENEFICIOS DEL TPV

Este tipo de herramientas informáticas permiten centralizar la administración de los principales procesos y operaciones, además del cobro en digital.

Los softwares de TPV pueden conectarse a tablets y permitir que los camareros realicen las comandas en línea y que estas se transmitan de forma digital a la cocina, agilizando el proceso y reduciendo errores.

Se pueden configurar la gestión de reservas y ocupación, y también se pueden crear planes de fidelización como descuentos de cliente frecuente.