La familia Ferreradquirirá las bodegas del grupo Freixenetfuera de Cataluña y la filial que tiene en Argentina y pagará 15 millones de euros por este paquete de activos, informa el diario Expansión.
Pedro Ferrer Noguer, uno de los dos consejeros delegados del grupo, será el comprador de las seis bodegas con el aval de su padre, José Ferrer Sala, presidente de honor. Ferrer Sala (42,5%) y su sobrino, José Luis Bonet (7,5%), controlan el 50% de Freixenet, mientras que el grupo alemán Henkell posee el 50% restante.
En concreto, las bodegas que se van a comprar son Vionta (Rías Baixas), Valdubón (Ribera del Duero), Solar Viejo (Rioja), Morlanda (Priorat), Fra Guerau (Montsant) y la argentina Finca Ferrer, que incluye 320 hectáreas en el valle vinícola de Tupungato, en Mendoza.
La operación se formalizará antes del próximo 31 de julio y se espera que las marcas compradas sigan siendo comercializadas por Freixenet a través de un contrato de servicios con la familia Ferrer.
En una segunda fase, Freixenet evaluará el futuro de las bodegas que tiene fuera de España y podrían venderse las de Australia y Burdeos
En una segunda fase, Freixenet evaluará el futuro de las bodegas que tiene fuera de España y podrían venderse las de Australia y Burdeos (Yvon Mau). En 2017 Henkell y Freixenet alcanzaron una facturación conjunta de 1.237 millones y su objetivo es llegar a 1.500 millones en 2025.
