Ebro Foods aumentó el 10,6% su beneficio neto entre enero y marzo de 2021 hasta alcanzar los 52,8 millones de euros, informa el fabricante de pastas y arroces.

Por su parte, el importe neto de la cifra de negocio de la compañía se situó en los 697,2 millones, "impulsado por el buen comportamiento de las marcas y un mayor consumo en el hogar aún influido por confinamientos puntuales, restricciones de aforo y de horarios en la restauración, limitación de desplazamientos, etc", explica la empresa.

A este respecto, precisa que la comparativa con el ejercicio anterior se ve "distorsionada por los extraordinarios picos de demanda" que registró el Grupo con la irrupción de la pandemia en marzo del 2020. En TAMI 21/19 la cifra de negocio subió el 6,5%.

Asimismo, el Ebitda-A se redujo el 2% hasta los 94,1 millones y el margen Ebitda-A creció 90 pb. hasta 13,5%.

En cuanto a la deuda neta se sitúa en 895 millones de euros, 56 millones menos que a cierre del ejercicio 2020. Esta cifra recoge 22millones de inversiones CAPEX, un incremento de 99 millones en el Circulante sobre el cierre del ejercicio anterior, por las posiciones tomadas en materias primas durante el trimestre y el ingreso de 107 millones por la venta del negocio de pasta seca canadiense.

RESULTADOS POR LÍNEAS DE NEGOCIO

Por lo que respecta a la división de Arroz, la cifra de ventas de la división se sitúa en 438,3 millones y el Ebitda-A alcanza los 60,3 millones de euros. La compañía señala que se está enfrentando a cinco importantes focos de inflación en los ámbitos de materias primas, fletes para los arroces aromáticos, transporte local, materiales de envasado, embalaje y paletería y energía y combustibles.

Así, en Europa esta inflación de costes se ha situado en el entorno de los 22 millones de euros y en Norteamérica alrededor de 15 millones de dólares.

En cuanto a las marcas, evolucionan favorablemente en ambos negocios, siendo especialmente reseñable la reactivación del mercado de vasitos en Europa y el crecimiento registrado por esta misma categoría, 50% año sobre año, en el mercado norteamericano.

En canto al área de Pasta, las ventas alcanzaron los 277 millones de euros y el Ebitda-A se cifró en 37’8 millones.

Tras completar durante el trimestre la desinversión del negocio norteamericano de pasta seca, la división ha quedado integrada por los negocios de fresco y seco de Panzani, Garofalo en el segmento premium y Bertagni y Olivieri en el ámbito del fresco.

En lo que respecta a las materias primas, esta área también ha tenido que afrontar una subida de precios, que afecta fundamentalmente al negocio europeo, cuyo impacto estima la compañía en torno a 10 millones de euros.

Al igual que en arroz, las ventas de esta división crecen de manera "muy satisfactoria" durante el trimestre, siendo la comparativa de los meses de marzo la que distorsiona la imagen final, como consecuencia del fuerte acopio durante este mes el ejercicio pasado.

Destaca la evolución de la marca Garofalo, que continúa encabezando el premium y crece con fuerza en España, Reino Unido, Suiza y Canadá.

Cabe señalar que tras la salida del negocio de pasta seca de Riviana y Catelli, Ebro Foods mantiene la misma estructura y durante un año prestará servicios transitorios a los compradores de ambos negocios.

UN "TRIMESTRE COMPLEJO"

La compañía hace hincapié en que este primer trimestre de 2021 ha sido "muy positivo en ventas" gracias a la buena evolución de sus marcas. "Tras pasar los momentos más difíciles de pandemia, comienza a verse nuevamente el interés del consumidor por nuestros productos de mayor valor añadido", asegura.

"Hemos culminado con éxito la desinversión del negocio de pasta seca en Norteamérica, con el cierre de las operaciones puestas en marcha a finales de 2020 y la venta de la marca Ronzoni y la planta de Winchester. Los negocios de Garofalo y Tilda continúan su buena trayectoria, reforzando su expansión en otros mercados", añade.

"Durante el trimestre hemos confirmado el entorno de dificultades que vislumbrábamos al cierre del ejercicio anterior: la alta inflación de los fletes y materias primas agrícolas y auxiliares, un contexto socioeconómico más deprimido, el retorno de las promociones y la reactivación del marco competitivo. La solvencia en la gestión, la solidez y la consistencia empresarial son nuestras principales armas para afrontar de manera eficaz este escenario de complejidad", concluye.