Fernando Fernández, consejero de Unilever desde el pasado marzo tras la marcha de Hein Schumacher, se ha estrenado en el cargo con una adquisición de calado.

La multinacional ha pagado 1.500 millones de dólares por Dr Squatch, una marca de cuidado personal para el público masculino. La dueña de Axe y Dove quiere crecer en un segmento donde tradicionalmente ha tenido dificultades —el higiene masculino—, pero en el que considera que existe potencial para crecer con márgenes más altos que en otras áreas.

Con sede en Estados Unidos, Dr Squatch fabrica jabón natural, desodorantes, champús y otros productos de higiene para hombre. Sus productos se venden tanto directamente a los consumidores a través de su página web como a través de los distribuidores tradicionales.

La marca ha experimentado un rápido crecimiento durante los últimos años gracias a campañas virales de marketing que han contado con el apoyo de celebrities como la actriz Sydney Sweeney y el exboxeador Mike Tyson.

Fabián García, director de la división de Personal Care de Unilever, ha explicado que la multinacional "está ilusionada por escalar la marca a nivel internacional, de manera que complemente nuestra oferta en el segmento de cuidado personal del hombre".

Fernando Fernández, el nuevo consejero delegado, cuenta con experiencia como presidente global de Belleza y Bienestar de Unilever, un segmento prioritario en el nuevo rumbo de la compañía, que espera deshacerse de su división de Helados y ha vendido varias marcas alimentarias de bajo crecimiento y ámbito regional en los últimos años.

El foco está ahora puesto en productos de belleza y cuidado personal, en especial de gama alta, lo que debería ayudarle a mejorar sus resultados. En el último ejercicio, su beneficio neto cayó el 11,5%.