Mayo está siendo dramático en cuanto a incendios se refiere en empresas relacionadas con el sector del gran consumo. Si ya informamos hace unas semanas de dos importantes incendios que arrasaron la nave de Fandicosta en Moaña y un supermercado Lidl en Cádiz, ahora ha sido la planta de la empresa Embutidos Rodríguez en Soto de la Vega (León) la que ha sufrido la crueldad del fuego, que deja el futuro en el aire de cientos de trabajadores.

El incendio quedó controlado este domingo y será durante estos días cuando se analice el alcance de los daños y cómo repercutirán a los empleados. Desde el Gobierno de Castilla y León se ha creado una comisión de urgencia para poner "en marcha todas las medidas que permitan en el menos tiempo posible volver a levantar la fábrica y la actividad en La Bañeza".

Al parecer, el fuego se pudo originar en el digestor de la factoría, un lugar destinado a almacenar y fundir residuos de grasas, huesos o carne generados durante la producción. La planta no ha quedado totalmente destruída. Se han salvado de las llamas, por ejemplo, las oficinas de la fábrica y la zona del secadero.

La planta cárnica es una de las más importantes de la provincia de León. Cuenta con unos 400 empleados, el 80% de ellos autónomos, y de ella dependen decenas de proveedores de la zona de La Bañeza. Todos ellos están pendientes ahora de las ayudas públicas que puedan recibir para salvar este suceso cuanto antes.

En un comunicado, la dirección de la empresa ha querido enviar "un mensaje de tranquilidad", en especial a todos los trabajadores y colaboradores. "Queremos agradecer todos los mensajes y muestras de apoyo recibidos de nuestros empleados, colaboradores y autoridades", apunta.