A principios del pasado año, os contábamos las novedades más recientes en torno al genoma del trigo, uno de los cultivos más importantes y extensos del mundo. Entonces, científicos del Instituto Earlham (EI), junto con colegas en el Centro John Innes, ambos en Reino Unido, daban a conocer la imagen más completa del genoma del trigo hasta el momento. Pues bien, ahora, diversos artículos publicados en Science y Science Advances han hecho pública la secuencia completa del genoma del trigo, un avance que ofrece una poderosa herramienta para acelerar el desarrollo de nuevas variedades de este alimento diseñadas para abordar la nutrición humana.

En concreto, en el artículo de Science, el Consorcio Internacional de Secuenciación del Genoma de Trigo (IWGSC) presenta la primera secuencia completa del genoma de trigo integral de la variedad Chinese Spring, recoge Europa Press. Proporciona la ubicación y organización de más de 107.000 genes y más de 4 millones de marcadores en los 21 cromosomas de esta variedad de trigo, algunos relacionados con rasgos importantes para la agricultura.

Un segundo artículo en este mismo medio utiliza el nuevo genoma de referencia para realizar un análisis genómico de la expresión de homólogos o copias de genes que son similares pero que se originan en diferentes genomas ancestrales. Identificar estos en el trigo ayudará a los científicos a comprender mejor la biología fundamental del trigo poliploide. Según los autores, su trabajo proporciona un marco para identificar genes clave que apuntalan rasgos agrícolas valiosos en el trigo.

Finalmente, en otro artículo publicado en Science Advances, los investigadores examinaron las proteínas que contribuyen a diversas enfermedades y alergias del trigo, como la celiaquía, el asma del panadero y la anafilaxia inducida por el ejercicio dependiente de alimentos (WDEIA).

En estos artículos se recuerda que el trigo aporta alrededor de un quinto del total de calorías consumidas por los humanos. En consecuencia, "los rendimientos y la producción de trigo afectan a la economía mundial, y las cosechas fallidas pueden conducir a disturbios sociales". "Los productores se esfuerzan continuamente por desarrollar variedades mejoradas ajustando los parámetros de calidad de uso final y rendimiento genéticamente complejos, a la vez que mantienen rendimientos estables y adaptan el cultivo a los estreses bióticos y abióticos regionales específicos".