Mercadona ha dado un paso modernizador y ha decidido que sus directivos podrán, si lo desean, prescindir de la corbata. El uso de este complemento quedará restringido sólo a situaciones en las que el protocolo lo exija, informa el diario Las Provincias.

Fuentes de la compañía que preside Juan Roig han precisado al citado medio que, en cualquier caso, "no se trata de obligar a quitársela, sino de que cada cual elegirá cuándo usarla con total libertad". La compañía subraya que, de este modo, pretende ir "con el signo de los tiempos".

La medida afecta tanto al presidente como al último coordinador de planta, que es la denominación que en la cadena de supermercados reciben los responsables de tienda, según se señala desde la empresa.

Y para dar ejemplo de este cambio de aire en su compañía, el propio presidente de Mercadona, Juan Roig, presentó sin corbata recientemente a la nueva generación de participantes en el programa de aceleración de proyectos empresariales innovadores Lanzadera. Roig eligió un traje gris, pero con la camisa abierta y, desde luego, el acto no perdió ni un ápice de importancia.

Una anécdota sirve como buen ejemplo de lo que supone esta modernización de Mercadona. Fuentes cercanas a la compañía consultadas por GranConsumoTv aseguran que en una ocasión Juan Roig llegó a recriminar a Marcos de Quinto, cuando éste era presidente de Coca-Cola Iberia, que se presentara a una reunión sin corbata. Las mismas fuentes añaden que posteriormente De Quinto le envió a Roig una corbata... por si se le volvía a olvidar en la próxima visita.

La decisión de Mercadona sobre las corbatas se suma a las de otras grandes compañías de todo el mundo que han optado por esta estética. Es el caso de Apple, Microsoft o Facebook. Los jerséis negros que usaba Steve Jobs, los suéteres a caja y las camisas a cuadros de Bill Gates o las camisetas y sudaderas de Mark Zuckerberg han creado tendencia en el mundo de los negocios.