Alcampo y Carrefour lideran el ranking de sostenibilidad en la gran distribución española, según un estudio elaborado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) con el apoyo del Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030. Ambas cadenas encabezan la clasificación al combinar de forma más consistente acciones visibles en tienda, una intensa labor de información al consumidor y un elevado compromiso social, los tres ejes sobre los que se articula el análisis.

Alcampo obtiene la mejor puntuación global, con 89 puntos sobre 100, seguida muy de cerca por Carrefour (86). A cierta distancia aparecen Lidl (75), El Corte Inglés (61) y Aldi (55), que completan el top 5 de un ranking en el que también figuran Consum, Eroski, Dia, Ahorramás y Mercadona, que cierra la clasificación.

El estudio se ha centrado en diez cadenas de implantación nacional y regional —seleccionadas por cuota de mercado y representatividad territorial— y evalúa hasta qué punto sus políticas se traducen en prácticas reales para reducir el desperdicio alimentario, un ámbito que ha cobrado especial relevancia tras la aprobación, el pasado 20 de marzo, de la Ley de Prevención de las Pérdidas y el Desperdicio Alimentario, alineada con los objetivos de la Agenda 2030.

La clave del liderazgo de Alcampo y Carrefour está, según la OCU, en la amplitud y visibilidad de las medidas aplicadas en tienda. Ambas destacan en iniciativas como los descuentos claramente señalizados en productos de fecha corta, los packs antidespilfarro, la comercialización de frutas y verduras "feas" o la elaboración de nuevos productos a partir de excedentes. No solo cuentan las medidas, subraya el informe, sino también cómo se comunican: la claridad en el precio, el etiquetado y la ubicación del producto es determinante para que el consumidor las identifique y las aproveche.

Lidl, tercera en el ranking, puntúa alto en información y sensibilización, así como en compromiso social, pero queda penalizada por un menor despliegue de acciones visibles en tienda frente a las dos primeras. El Corte Inglés, pese a obtener la máxima puntuación en información y compromiso social, desciende posiciones por la escasa presencia de descuentos sistemáticos en productos cercanos a su fecha de caducidad. Aldi, por su parte, combina buenas prácticas informativas con un compromiso social más limitado.

El trabajo se ha completado con un estudio de campo en supermercados de las diez cadenas en cinco grandes ciudades —Barcelona, Bilbao, Madrid, Sevilla y Valencia— para comprobar qué ocurre realmente con los alimentos próximos a caducar. Los resultados muestran un panorama heterogéneo: mientras que en Ahorramás, Alcampo, Aldi, Consum y Lidl es habitual encontrar este tipo de productos rebajados de forma sistemática, en Carrefour, Dia, Eroski y Mercadona la práctica es frecuente pero irregular, y en El Corte Inglés resulta excepcional.

También difiere la estrategia de ubicación. Carrefour apuesta de forma mayoritaria por espacios específicos para productos de "fecha próxima", convirtiendo el descuento en una sección reconocible, mientras que otras cadenas integran estos productos en el lineal habitual, obligando al consumidor a "descubrirlos" entre el surtido general.

En conjunto, el informe concluye que la distribución española avanza en la lucha contra el desperdicio alimentario, pero con sistemas todavía poco armonizados. La nueva ley convertirá en obligatorias muchas de las prácticas ya implantadas de forma voluntaria, lo que previsiblemente elevará el listón en un sector donde, por ahora, Alcampo y Carrefour marcan el paso.