En estas últimos meses os hemos hablado mucho de las llamadas dark kitchen (o cocinas fantasma) un fenómeno muy ligado a la hostelería que pretende mantener a flote estos negocios en tiempos de pandemia. Este modelo se basa en la preparación de comida en establecimientos en los que no existen ni mesas ni camareros pero donde sí se preparan los platos que después se reparten a domicilio.
Pues bien, ahora empiezan a sonar ya los denominados 'supermercados fantasma', que se están haciendo un hueco en el panorama de la distribución española. Como os comentábamos recientemente, Dija es un claro ejemplo de ello. El desembarco de esta enseña, totalmente online, en nuestro país tiene unas peculiaridades concretas que no pueden pasar desapercibidas para las cadenas con envíos a domicilio pero tampoco para operadores como Glovo, Deliveroo e incluso Amazon.
Y es que esta startup de origen londinense ha anunciado su llegada a Madrid con un servicio que cuenta con un compromiso de garantía: si la compra no se reparte en 10 minutos, el cliente recibe tres meses de repartos gratuitos. Además, otra seña de identidad de Dija es ofrecer seguridad laboral a todos sus trabajadores: empleados de oficina, operaciones y repartidores están en nómina.
Sin duda, el objetivo de esta firma es conquistar el mercado de la compra online a domicilio. De momento, ha aterrizado en la capital española con seis micro-centros de distribución, también denominados dark stores, en menos de dos meses, y cuenta ya con una plantilla de más de 100 personas. Actualmente cubre el 90% de la zona metropolitana de Madrid con los seis dark stores repartidos por la ciudad, y próximamente abrirá en Valencia, Barcelona, Málaga y Sevilla.
DIA, EL CORTE INGLÉS, MERCADONA Y LAS DARK STORES
En este escenario, cabe recordar también el impulso que están tomando las dark stores, almacenes para la preparación y envío de pedidos por Internet, cada vez más de moda en el retail alimentario y en la hostelería, sobre todo a consecuencia de la pandemia, y que ofrecen numerosas oportunidades a los minoristas. De hecho, se están convirtiendo en una solución eficaz para dar el salto al canal online.
La cadena Dia ha sido una de las más activas en la materia. Recientemente, Diego Sebastián de Erice, director de ecommerce de la compañía, reconocía las ventajas de estas 'tiendas oscuras' (según su traducción del inglés): "Para poder gestionar sin incidencias y con la mayor agilidad el número de pedidos se establecieron cambios en el modelo logístico, favoreciendo el modelo mixto de distribución desde 'mini dark stores', agilizando al máximo la distribución de la última milla y dotando a la operación de la mayor flexibilidad y eficiencia", explicaba.
En concreto, Dia ha puesto en marcha 14 dark stores (tres de ellas en la provincia de Barcelona,) 12 de las cuales siguen funcionando con capacidad para satisfacer unos 400 pedidos diarios.
Por su parte, El Corte Inglés también optó por cerrar su tienda Bricor en Alcalá de Henares (Madrid) para transformarla en una dark store con capacidad para atender 1.000 pedidos diarios.
Y no podemos dejar de mencionar a Mercadona. La enseña puso en marcha en 2018 su 'colmena' en Valencia, tras invertir inicialmente 12 millones de euros. La experiencia se implantó un año después en Barcelona, y en plena pandemia la cadena destinó 12 millones de euros a su nueva 'colmena' de Getafe (Madrid), un almacén y centro logístico destinado exclusivamente a este servicio.
BENEFICIOS DE LAS DARK STORES
Entre los claros beneficios que ofrece esta fórmula, el portal Altertecnia, destaca la posibilidad de dar el salto online con una logística asegurada. Además, permite mantener empleos, aumentar la preparación de pedidos (lo que repercute en más ventas), y es una fórmula que 'trabaja' todos los días del año.
También tiene la ventaja de ser un sistema tres veces más eficiente que un súper tradicional; implica vender más sin abrir más tiendas; da uso a los bienes inmuebles; y si la entrega es a domicilio, reduce las distancias de transporte –ya que es un centro de proximidad-, y por ende el impacto ambiental. La logística y distribución es centralizada y menos costosa.
Hay otros dos factores que atañen al consumidor y que hacen de las dark stores soluciones interesantes: permiten dar un servicio diferenciador y competitivo y el cliente ahorra tiempos con este sistema.
