Ikea España ha cerrado su ejercicio fiscal 2025 con una facturación de 1.986 millones de euros, un 2,8% más que el año anterior, según los datos publicados por la compañía. La filial española de la multinacional sueca mantiene así su senda de crecimiento, impulsada principalmente por el volumen de ventas: en total, los consumidores españoles adquirieron 164,3 millones de productos entre septiembre de 2024 y agosto de 2025.
No evoluciona tan bien Ikea Food, que el año pasado creció un 8,7% y este experimenta un frenazo importante: avanza sólo un 1,7% hasta los 78,5 millones de euros. La división alimentaria de la cadena ha pasado de ser un motor de crecimiento a incrementar sus ventas por debajo de la facturación global.
Aunque la compañía no ha ofrecido datos sobre su beneficio neto, sí ha avanzado que todos sus mercados en la Península muestran crecimientos. "Ha sido un buen año para nosotros y evolucionamos de forma positiva. Más allá de los números, estamos orgullosos porque, a pesar de ser un año de retos en el contexto económico y de consumo, hemos sido capaces de mantenernos al lado de las necesidades de los hogares españoles, impulsar proyectos innovadores y crear empleo de calidad", ha señalado Carl Aaby, consejero delegado de Ikea en España.
El empleo acompaña el crecimiento en ventas: la plantilla cerró el año con 9.736 trabajadores, 130 más que en 2024, y el 91% cuenta con contrato indefinido. En cuanto a la afluencia, las tiendas de Ikea recibieron cerca de 50 millones de visitantes, mientras que el canal online superó los 228 millones de visitas, cifras prácticamente estables respecto al año anterior.
La venta online, uno de los motores del crecimiento
El comercio electrónico sigue ganando peso en el negocio del gigante sueco. Las ventas online representan ya el 27% del total, con una facturación de 536,9 millones de euros, un 11% más que el año anterior.
La empresa también ha invertido en mejorar su red física y su accesibilidad. Durante el ejercicio, Ikea inauguró un nuevo centro de planificación de pedidos en Granollers (Barcelona) y reformó tiendas clave como las de Santander, Badalona, Sevilla y San Sebastián de los Reyes, dentro de un plan de expansión y modernización que ha supuesto una inversión de 90 millones de euros.
La filial española también ha destinado 14 millones de euros a reducir el precio de más de 2.000 productos, en línea con su estrategia de mantener la asequibilidad como ventaja competitiva.
Innovación, una de las claves
La compañía ha destacado el papel de la innovación como eje de su transformación. Entre las iniciativas más recientes figura el lanzamiento de una plataforma que facilita la compraventa de productos de segunda mano entre clientes, ya disponible en toda España, y la expansión de Ikea Home, su marketplace de servicios para el hogar, que tras debutar en Madrid ha llegado también a Barcelona.
"Queremos hacer un mejor Ikea, impulsando el desarrollo de soluciones que transformen la vida en el hogar, con impacto tanto en el planeta como en el bienestar de las personas", ha subrayado Aaby.
Mirando al futuro, el primer ejecutivo de la compañía advierte que el sector vive un momento de profunda transformación. "La distribución y el comercio están sufriendo cambios notables debido a las nuevas pautas de consumo, el entorno macroeconómico y la irrupción de la inteligencia artificial, que vuelve a cuestionarlo todo. Estamos introduciendo la IA en todos nuestros procesos, tanto internamente como en respuesta a las necesidades de nuestros consumidores", ha afirmado.
Caída de ventas globales en el grupo Ingka
A nivel internacional, el grupo Ingka —que gestiona 367 de las 422 tiendas de Ikea en el mundo— ha cerrado el año con una facturación de 39.000 millones de euros, un 1,6% menos que en el ejercicio anterior. Pese a la ligera caída, el grupo destaca el aumento de las unidades vendidas y de las visitas tanto físicas como online, con avances del 1,3% y del 4,6%, respectivamente.
