Heineken España ha presentado este miércoles sus compromisos de sostenibilidad de cara a 2025, cinco años antes que Heineken Global. En concreto, convertirse en cero emisiones netas en producción antes de 2025 y, ya este mismo año, tener una huella hídrica neutra en la elaboración de sus cervezas o que sus cuatro fábricas españolas cuenten con el certificado de 'cero residuos a vertedero'.

Todo ello, explica la compañía, siguiendo una hoja de ruta -bajo el lema 'Decididamente verdes'-, que se apoya en la colaboración e incluye toda su cadena de valor, del campo al consumidor (producción, distribución y consumo), para lograr un impacto cero en huella de carbono, agua y residuos y, en paralelo, un impacto positivo en la comunidad. En concreto, además de sus avances medioambientales, a través de su contribución a la economía española con casi 1.500 empleos directos y 110.000 indirectos, la utilización del 92% de materias primas locales, el apoyo a la hostelería con cerca de 340 millones de euros en los dos últimos años o la formación a más de 16.000 personas a través de la Fundación Cruzcampo.

"La sostenibilidad social y medioambiental está en el corazón de nuestro propósito y es uno de los cinco pilares de nuestra estrategia de negocio Evergreen. Porque el crecimiento y el beneficio son importantes, pero nunca en detrimento de nuestra ambición por construir un mundo más sostenible, justo y equitativo", ha señalado Etienne Strijp, presidente de Heineken España.

CINCO OBJETIVOS

Se trata así de un camino a medio y largo plazo basado en la cooperación y las alianzas, con cinco objetivos de cara a 2025, según ha desgranado Carmen Ponce, directora de Relaciones Corporativas y Sostenibilidad de la cervecera:

1.- CERO EMISIONES NETAS EN PRODUCCIÓN.

Con una clara apuesta por las energías renovables, la compañía ha reducido sus emisiones de CO2 el 19% desde 2018 y más del 45% de la energía que utiliza en sus fábricas ya es renovable, gracias a hitos como su alianza con Iberdrola, que le permite elaborar todas sus cervezas exclusivamente con electricidad 100% renovable desde 2020. Ahora avanza para hacer que todas sus fábricas funcionen solo con este tipo de energía, como ya sucede en Jaén, y con iniciativas como el proyecto termosolar que desarrolla con Engie, pionero para la industria agroalimentaria a nivel mundial, que le permitirá reducir su huella de carbono en casi 7.000 toneladas de CO2 al año.

2.- 30% MENOS EMISIONES EN TODA LA CADENA DE VALOR.

Consciente de que su producción apenas supone el 9% de las emisiones de CO2 que representa su actividad, la cervecera se marca este objetivo intermedio y colabora con sus partners para ser neutra en carbono en toda su cadena de valor en 2040. Concentra sus esfuerzos en las áreas que representan un mayor impacto, el packaging y la agricultura, con una firme apuesta por la sostenibilidad que le permite elaborar sus cervezas con el 78% de ingredientes procedentes de cultivos sostenibles certificados, y la ambición de alcanzar el 100% en 2025. Además, impulsa la producción de fertilizantes verdes y colabora
con Intermalta en un innovador proyecto de fertilización de precisión. Todo ello sin olvidar la distribución, con proyectos de logística sostenible de última milla, o los 227.000 sistemas de refrigeración ecoeficiente que ha implantado en bares de toda España.

3.- CERO HUELLA HÍDRICA EN FÁBRICAS.

Un compromiso que la cervecera ya ha logrado en 2022, casi una década antes de la fecha que se ha marcado la compañía a nivel global, gracias a sus programas de tratamiento y regeneración del agua y balance hídrico (con los que trata el 100% de sus aguas residuales y devuelve al entorno 1.900 millones de litros de agua al año, más del 100% del agua que contienen sus cervezas, gracias a los proyectos desarrollados en Doñana, la Albufera valenciana o la ribera del río Jarama). De cara a 2025 aspira a utilizar solo 2,6 litros de agua por litro de cerveza elaborado, es decir, menos de la mitad (-51%) del agua que utilizaba en 2008.

4.- CERO RESIDUOS EN FÁBRICAS Y MAXIMIZAR LA CIRCULARIDAD DE SUS ENVASES.

En el área de producción, Heineken logrará su objetivo este mismo año al certificar todas sus fábricas en España como '0 residuos a vertedero', como ya sucede en Jaén. Además, la compañía ha dado una segunda vida a 220.000 toneladas de subproductos, como levadura, bagazo y mezclas hidroalcohólicas. Asimismo, en materia de envases, trabaja para eliminar 1.600 toneladas de plástico y tener envases hechos con materiales 100% reciclados. Así, trabaja para que todos los elementos de su packaging estén hechos al 100% con material reciclado y procedan de fuentes sostenibles (como todo el cartón que utiliza, que proviene de bosques gestionados de forma responsable para evitar la deforestación), eliminando 1.300 toneladas de plástico de un solo uso por año y 300 toneladas de anillas de plástico, sustituyéndolas unas de cartón reciclado. También maximiza el uso de formatos retornables en hostelería (con el objetivo de pasar del 74% actual al 81% en 2025), además de seguir apostando por el reciclado de botellas y latas como socio de Ecovidrio y Ecoembes.

Por otra parte, estos días empezarán a llegar a los lineales de los supermercados sus primeros productos con el sello 'Compromiso cervezas sin huella', que refleja los avances que se ha marcado la cervecera de una forma didáctica.

5.- POR EL EMPLEO JOVEN.

La Fundación Cruzcampo, la cervecera más longeva de España, canaliza gran parte del compromiso social de la compañía desde hace más de 25 años. Los más de 38 millones de euros de contribución social que ha aportado durante este tiempo, las 16.000 personas que ha formado en hostelería y el 95% de inserción laboral que tienen los jóvenes participantes en su programa de becas Talento Cruzcampo son prueba de ello. Todo ello sin olvidar a sus agricultores y proveedores, ya que el 92% de sus compras son locales; las cerca de 1.500 personas que forman su familia en España, sus casi 110.00 empleos indirectos; sus consumidores, fomentando el consumo moderado de sus productos con embajadores como Rafa Nadal; y sus clientes hosteleros, a los que ha destinado 340 millones de euros en los últimos dos años para impulsar su competitividad.