Las ventas aceite de oliva en España se han reducido el 18,22% en los siete primeros meses de 2023, en comparación con el mismo periodo de 2022, con un total de 147,48 millones de litros, según datos de la Asociación Nacional de Industriales Envasadores y Refinadores de Aceites Comestibles (Anierac).

La patronal ha detallado que el aceite de oliva virgen extra ha registrado una caída del 13,99% en las ventas, con 63 millones de litros; mientras que las del suave han retrocedido el 28,53% (47,4 millones) y las del intenso, el 19,87% (19,76 millones).

Solo el aceite virgen ha tenido una subida en sus ventas, del 6,14%, con un total de 16,77 millones de litros entre enero y julio.

221 MILLONES DE LITROS A LA VENTA

A falta de dos meses para el cierre de campaña, se han puesto en el mercado 221,22 millones de litros de aceite de oliva, lo que supone una disminución del 14,05% respecto al mismo periodo de la campaña anterior, cifra relacionada directamente con los elevados precios que está alcanzando este producto. 

Entre octubre y julio se han comercializado 94,53 millones de litros de aceite de oliva virgen extra, el 10,77% menos en comparación con el mismo periodo de la campaña 2021/2022.

Le siguen los 74,29 millones de litros aceite de oliva suave (-20,20 %); 28,35 millones de intenso (-21,12%); y los 24,03 millones de virgen (+7,36%).

Solo en julio, las empresas de Anierac han vendido 55,53 millones de litros de aceite, de los que 21,78 millones eran de oliva; 1,83 millones, de orujo de oliva; y 31,91 millones, de refinados de semillas.

El aceite de orujo ha acumulado unas ventas de 10,21 millones de litros en los siete primeros meses del año, el 5% menos que entre enero y julio de 2022, y 14,73 millones en lo que va de la campaña 2022/2023, el 3,15% menos que en el mismo periodo de la campaña anterior.

Entre los aceites refinados, el de girasol ha cifrado sus ventas en 213,36 millones de litros, una bajada del 9,50% en comparación con el mismo periodo de la campaña anterior.

Asimismo, en ese periodo han comercializado 2,85 millones de litros de aceite de colza (-25,15%) y 1,17 millones de litros de aceite de soja (-44,56%), mientras que el de semillas presentó un aumento del 46,07%, con 70,11 millones.

Según la asociación, en los siete primeros meses del año se han puesto en el mercado 362,6 millones de litros de aceite, el 6,03% menos que en el mismo periodo de 2022.

PRECIOS AL ALZA

Los expertos auguran que los precios del aceite de oliva, que han experimentado una fuerte subida en las últimas semanas, van a mantener su escalada ante las expectativas de baja cosecha en la próxima campaña, que se iniciará a partir del mes de octubre.

El consultor oleícola Juan Vilar vaticina también un descenso en el consumo de este producto en beneficio de otras grasas vegetales y avanza que el enlace de la próxima campaña será casi nulo, con una cosecha similar o incluso peor y esto hace que la oferta para el próximo año agrícola sea inferior a la demanda potencial.

Además, estima que las subidas de precio irán deteriorando el consumo de forma gradual, "llevando a las familias a un desabastecimiento parcial provocado por las altas cotizaciones en el lineal".